Consejo Europeo. Aun no hay acuerdo pero nos conocemos más. O se conocen más los líderes europeos. Por ejemplo, con su sonrisa eléctrica, un tanto forzada, el primer ministro holandés. Mark Rutte, ha conseguido convertirse en el líder de Europa por unanimidad: todo el mundo le aborrece.

El húngaro Viktor Orbán ha resultado, una vez mas, el más claro: “Ese tipo holandés es el responsable del desastre”.

El país de la eutanasia utiliza la ideología de género contra los dos únicos pueblos de la UE no cristófobos: polacos y húngaros

Naturalmente, ese tipo, el Rutte, también tiene sus razones, que son la que más duelen al manirroto Pedro Sánchez: si pides donaciones haz el favor de poner orden en tus cuentas públicas porque si no, en unos años, volverás a pedir más donaciones.

Orden significa pensiones y reforma del mercado laboral. Traducido: retrasar la edad de jubilación de forma drástica ye imponer el despido libre (indemnizado pero libre) en la empresa. También supone reducir los impuestos laborales, sobre todo, cambiar cuotas por IVA.

Eso es lo que pide Rutte a España y en eso tiene razón. Hasta un personaje tan poco recomendable como el pirata holandés acierta de vez en cuando… y aquí acierta.  

Holanda exige a España retrasar la edad de jubilación y despido libre… y en eso, Rutte tiene razón

Ahora bien, lo que no puede pretender es que sea Holanda quien dictamine si cumples las condiciones o no. Es decir, que España se convierta en un protectorado de La Haya Y lo que tampoco puede pretender Rutte es aplicar, como buen discípulo del Nuevo Orden Mundial NOM), la ideología de género a los dos únicos países de la Unión que continúan creyendo en los principios fundacionales de la UE: es decir, en los principios cristianos: Polonia y Budapest.

Eso es: el plan de Mark Rutte consiste en convertir a España e Italia en protectorados económicos de La Haya y en obligar a Varsovia y Budapest a abandonar sus principios cristianos.

Y todo esto resulta bello e instructivo porque significa que el país de la eutanasia, que ya ha llegado a los niños, utiliza la ideología de género contra los dos únicos países de la UE no cristófobos. Rutte odia a Polonia y Hungría por su precitada cosmovisión cristiana de la Vida y entonces les acusa de atentar contra los derechos humanos.

Rutte aborrece a Hungría y Polonia por su presente, a España e Italia por su pasado… católico. Y ahora que les puede humillar a los cuatro, no desaprovecha la ocasión

Dicho de otra forma: Rutte aborrece a Hungría y Polonia por su presente, a España e Italia por su pasado… católico. Y ahora que les puede humillar a los cuatro, no desaprovecha la ocasión.

Entonces, ¿cuál es la solución al Consejo Europeo? Por un parte, volver a la libertad de los hijos de Dios, que pregonan Varsovia y Budapest y, por otra, comportarse con los países del sur y del este, no con solidaridad sino con justicia, con la convicción de que los Estados Unidos de Europea sólo podrán ser una sola nación cuando sus habitantes ricos ayuden, no presten, a sus habitantes pobres.

Exactamente lo mismo que hace cualquiera de los 27 países de la Unión de puertas adentro. Por ejemplo, en España, los madrileños pagan más impuestos que los andaluces dado que los madrileños son más ricos y tienen el deber de ayudar a los andaluces, que son más pobres.

Porque con este “tipo”, Mark Rutte, la UE seguirá en su fracaso actual, que empieza a sentirse como fracaso permanente.

A ver si va a resultar que los ingleses tenían razón.