CaixabankEmpecemos por los resultados durante el primer semestre. Crecimiento en todos los márgenes. Más ingresos por créditos, más por comisiones (sobre todo de fondos de inversión) y por seguros. Y más importante: se reduce el cociente de eficiencias y aumentan los cocientes de rentabilidad sobre recursos propios (ROE y derivados) Y sobre activos (ROA y compañía).

Hablamos del primer banco de España o, al menos, del primer banco en España y Portugal: 37.286 empleados, 5.239 oficinas. Ha introducido las ‘oficinas store’ una denominación tan tonta como cualquier otro anglicismo (por qué no llamarlas oficinas-almacén. Para entendernos: 2,5 oficinas hacen una store, el CEO de Caixabank, Gonzalo Gortázar, (en la imagen) dice que se han diseñado pensando en el cliente y que apenas tiene efectos sobre el personal. Dado que durante el último año la plantilla ha permanecido incólume y que las store ya suponen el 4% de la red total y atiende a un 15% de los clientes, no sé si la principal exigencia de los clientes es la que suprimen las sucursales ‘store’: la cercanía física.

Pero la banca, un sector en decadencia respecto a los fondos (banca en la sombra) y lastrado por los tipos de interés ceroceristas, está pesando en un cliente al que le gusta poco ir a la oficina. Pues más le vale que así sea, pero la evolución no siempre va en la misma dirección. Evolucionamos a izquierda o derecha… ya veces hacia atrás. Sobre todo, porque no evolucionamos hacia algo: sencillamente cambiamos de conducta respecto a la anterior.

Fusiones bancarias. Por vez primera, el CEO de Caixabank da pábulo a posibles consolidaciones

Pero lo bueno viene ahora. Cuando preguntan a Gortázar por el famoso impuesto sobre la banca que quiere aplicar Pedro Sánchez (aunque todavía no sabemos ni en qué ni cuánto). Y ahí si salta Gortázar, un hombre más amante de la ironía que del golpe directo. Ojo a la bronca que le larga al gobierno de don Pedro Sánchez: “En lo que hay que pensar es en las cuentas públicas. Llevamos cuatro años creciendo al 3%. Pero déficit público aún está en el 3% y hay que reducirlo”.

Y más: reducirlo “es la mejor receta para mantener el Estado del Bienestar, porque ha venido una crisis muy fuerte y el Estado ha podido paliar sus efectos gracias a una Estado del Bienestar con las deudas claras”.

Por si no lo han cogido: que a Gortázar no le gusta ni el impuesto desconocido ni la relajación sanchista en la lucha contra el déficit: “Es importante que las cuentas públicas estén en orden para poder hacer ese mismo esfuerzo de apoyo a la sociedad si viniera otra crisis… Hay que aprovechar la buena parte del ciclo para reducir el déficit”. Palo al Gobierno Sánchez e indirectamente, aplauso al Gobierno Rajoy, también sin citar, que es quien ha permitido ese crecimiento y esa reducción del déficit fiscal… con mayoría parlamentaria y sin ella...

Sí, porque encima Gortázar asegura que hay que acostumbrarse a mayorías políticas menos estables. E insiste en que había crecimiento con inestabilidad política. Es decir, que Rajoy lo hizo muy bien. ¡Ay Gonzalo!, alguien no te lo va a perdonar…

Volviendo al sector bancario. Por vez primera, el CEO de Caixabank da pábulo a posibles consolidaciones. Con toda la levedad del ser y hasta la del no ser: pero Gortázar se refiere (sin citarlo, como a Sánchez y a Rajoy), más que nada, a que Caixabank no está buscando ningún matrimonio pero que, claro, vivimos en tiempos de baja rentabilidad y, entonces, se puede “aguantar con una rentabilidad baja y esperar a la subida de tipos” pero también cabe la otra posibilidad: para algunas entidades “la consolidación puede ser una forma de asegurar que aguante”. Nunca lo he visto ser tan claro.