El Ministerio de Igualdad trabaja incansablemente en pro de los derechos de las féminas y no se le pasa nada por alto. Ahora le ha tocado el turno a las series de televisión, con personajes femeninos protagonistas. El organismo que dirige Irene Montero ha publicado un estudio sobre «los estereotipos, roles y relaciones de género en series de televisión» españolas. El documento critica, entre otros asuntos, que las actrices sean de una «belleza extraordinaria, con un maquillaje y efectos que las hace todavía parecer más bellas». Una pregunta, señora ministra, ¿cuál es el problema, que sean bellas en origen o que las maquillen y sean todavía más bellas? A lo mejor se solucionaría contratando a actrices más 'del mónton'. 

Según Ok diario, el Instituto de la Mujer, dependiente de Igualdad, ha sido el encargado de elaborar, junto a la Asociación de Mujeres Cineastas, un informe de más de 80 páginas en las que se analizan las series de producción española con perspectiva de género. 

Entre otras conclusiones, el documento asegura que en las series protagonizadas por mujeres como Las chicas del cable hay «cierto abuso y cosificación» en la «presentación de las mujeres». Son mujeres «representadas por actrices de una belleza extraordinaria, con un maquillaje y efectos que las hace todavía parecer más bellas, sus vestuarios espectaculares, que realzan aún más sus cuerpos ‘diez’».

Critican también que en la famosa serie «viven y visten muy por encima de sus posibilidades económicas, como trabajadoras con baja cualificación».

Pero aún hay más. Y es que parece que a Irene Montero, además de la belleza, le molestan las familias unidas. 

Según el estudio, las series dan una especial relevancia a las familias, algo que no parece agradar especialmente al Ministerio. «Sospechamos que se produce una idealización de éstas, puesto que el amor y el cariño se refleja mediáticamente en la muestra con el doble de apariciones que el conflicto», aseguran. «Frente a cierta idealización en mostrar las relaciones familiares, curiosamente, esto contrasta con el hecho de que las relaciones de pareja no son tan positivas, por lo que se asemejan bastante más a la realidad no ficcionada»... ¿Tiene algún problema con la unidad entre los seres queridos la señora ministra?

Por último, otro de los aspectos analizados han sido los sexuales. En este sentido aseguran que la representación de homosexuales es la adecuada y corresponde con la realidad. No sabemos si a la realidad. A lo que sí corresponde es a una cuota de personajes homosexuales que deben aparecer en las series para que estas prosperen. 

A tenor de estos datos, apuntan que «resulta interesante» comprobar como las series apuestan por una sobre-representación de las relaciones homosexuales explícitas.