La lucha contra el cambio climático avanza a pasos agigantados. Recientemente un científico sueco, Magnus Söderlund, ha encontrado la solución a la superpoblación mundial… Comer carne humana. Dice Söderlund que hay que dejar atrás los tabús sobre el canibalismo y pensar que comer carne fresca puede resolver los problemas alimentarios a nivel global. Pero no se asusten, asegura que todavía no ha puesto en práctica su teoría, aunque como hombre de mente abierta que es, estaría dispuesto a probarlo.

Y por si esto del canibalismo en pro del medio ambiente no les convence, hay otra opción: convertir los cadáveres humanos en compost, en tierra fértil. A mí no se me ocurre un método más natural y respetuoso con el medio ambiente para cerrar el ciclo de la vida. Todo muy bello e instructivo.