Sr. Director: Ante la declaración de ese descerebrado moro en español de volver a Al Andalus, delirante, por qué nadie en Occidente desarrolla un informe total de esta religión que es el mal en la tierra, el demonio en acción. Para empezar poca gente sabe lo que es el islam, en Argentina no tienen ni idea. Hay vídeos para mostrar tanto sus monstruosas mutilaciones a nenas, que las feministas ni comentan, como las atrocidades inenarrables que hacen con sus mujeres, y que deben ser mostradas en los medios. Pero lo más llamativo es que siempre se condena a Israel, todo a favor de Palestina y en general, veo en sus diarios que todos protegen al cruel islam como religión de paz, una locura, y nadie habla de que ellos vinieron seis siglos después del cristianismo arrasando todos lo lugares cristianos, empezando  por Constantinopla..., ¿Por qué cuando esperpentos islámicos dicen de volver a España nadie habla de Constantinopla y la segunda catedral del cristianismo, Santa Sofía, y los lugares santos robados como Antioquía, Esmirna, Éfeso y todos los países que eran de mayoría cristiana como Irak Líbano etc. y, el horror del genocidio armenio? Por otra parte ¿cómo van a tratar con leyes de civilización a alguien que viene a matarte sin hacerle nada? Esta gente es diabólica, el solo ver a sus mujeres amorfas con esa ropa e imponiendo sus costumbres... Y dicen que los tratan mal, aquí en Argentina vinieron españoles e italianos sin nada y lo pasaron mal pero luego trabajando progresaron, porqué darles a esa roña inmunda, que como dijo Oriannna Fallace se reproducen como ratas... dan asco y degüellan, asesinan masivamente gente indefensa ante la complicidad, como veo en la insoportable Cataluña. Échenla de España, pero ustedes, como dijo Pérez Reverte no reaccionan. Hay que volver a las cruzadas de este siglo, pelear a muerte o desaparecemos. Es imprescindible que se haga una tarea de información a la gente y se muestren en forma cruda, en los medios masivos sus crueldades más atroces, que lo vean porque no se sabe y el mundo libre está anestesiado. Emilio Barrera