Como recogió Hispanidad, el Congreso de Guatemala aprobó la semana pasada la Ley de Protección de la Vida y la Familia, cuyo objetivo es “resaltar el derecho a la protección de la vida, la familia, la institucionalidad del matrimonio entre un hombre y una mujer, la libertad de conciencia y de expresión, así como el derecho de los padres para orientar a sus hijos en los ámbitos de la sexualidad”. Además, la nueva ley —cuyo paso final será la firma del presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei— “establece normativas para defender la vida desde su concepción, a través de la definición de los diferentes tipos de aborto y sus reformas al Código Penal para su sanción”. “La ley también prohíbe de manera expresa el matrimonio y unión de hecho entre personas del mismo sexo”.

En Guatemala, actualmente, el aborto está permitido sólo cuando está en riesgo la vida de la madre, recuerda Aciprensa. 

Además, en otros países hispanos, como Honduras, El Salvador, Nicaragua, Surinam, República Dominicana, Haití, Jamaica, San Cristóbal y Nieves el aborto es ilegal por cualquier motivo, según Aciprensa.

Sin embargo, el pasado 9 de marzo, el Congreso de Guatemala designó el mismo 9 de marzo como el Día Nacional de la Vida y la Familia, y las iglesias evangélicas declararon a Guatemala la capital pro-vida de Iberoamérica, informa C-Fam.

Líderes religiosos y organizaciones provida de todo el continente americano elogiaron a Guatemala en una ceremonia para reconocer a la pequeña nación centroamericana como la capital provida de Iberoamérica.

“Para vivir en paz, necesitamos respetar la vida desde la concepción. Esto es lo que exige la Constitución”, dijo el presidente Alejandro Giammattei durante el evento del miércoles. “Cuando tenemos fe, es nuestra fe la que lo exige, no solo la ley”, dijo emocionado. “¡Hoy decimos no a la guerra! ¡Sí a la paz! ¡Sí a la Vida!” exclamó refiriéndose a la guerra en curso en Ucrania. Giammattei es católico pero muy querido por los evangélicos por su fuerte apoyo a la vida y la familia.

Varios pastores de iglesias evangélicas, un imán y un rabino agradecieron a Giammattei en la ceremonia del miércoles. El Nuncio Apostólico en Guatemala, Francisco Montecillo Padilla, representante personal del Papa Francisco en el país mayoritariamente evangélico, se mostró muy agradecido. “Nunca debemos cansarnos de presentar la verdad sobre la familia tal como Dios la ha querido desde el momento de la creación, una y otra vez”, dijo, y agregó que implicaba ir contra la corriente de la cultura dominante y requería “paciencia, esfuerzo, sacrificio y la búsqueda constante del entendimiento mutuo”.

Giammattei es católico pero muy querido por los evangélicos por su fuerte apoyo a la vida y la familia

En 2019, su gobierno adoptó una política nacional que promueve la protección de la maternidad y los niños por nacer, fortalece la vida familiar y promueve los valores familiares. También ha tomado fuertes posiciones provida a nivel internacional y en las Naciones Unidas, incluida la adhesión a la Declaración del Consenso de Ginebra .

Habló con seriedad sobre sus convicciones pro-vida y luchas políticas a los pastores de 400 iglesias evangélicas del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia el jueves cuando se reunieron en sesión plenaria.

Giammattei, que tiene esclerosis múltiple y camina con muletas, ha tenido carreras exitosas como médico, en los negocios y en el gobierno. Pero luchó con su enfermedad desde el principio de su vida. Dijo que intentó suicidarse cuando le diagnosticaron esclerosis múltiple a la edad de 23 años en su último año de la escuela de medicina. Encontró a Dios en esa crisis cuando dejó de protestar contra Dios y comenzó a pedirle que le revelara su propósito para él.

Giammattei atribuyó la feroz oposición a su presidencia a sus convicciones pro-vida y pro-familia. Sus opositores políticos lo mantuvieron en prisión durante diez meses antes de que pudiera ascender a la presidencia. Las críticas a sus políticas solo lo hicieron más seguro, dijo, y agregó que a pesar de todos los problemas que ha tenido, duerme como un bebé por la noche porque su conciencia está en paz.