El miércoles 28 el ministerio de Igualdad celebraba un comité de crisis sobre la violencia machista alertado por la muerte de 8 mujeres y otros dos casos por confirmar en el mes de diciembre. "Las alarmas están encendidas. Ocho mujeres asesinadas en diciembre -y otros dos casos que en estos momentos están en estudio- convierten este mes en el que más muertes por violencia machista se han registrado en este año. "La situación es de extrema gravedad", admitían desde el ministerio de Irene Montero. 

"El objetivo de este comité de crisis es hacer autocrítica. Si hay asesinatos hay un fracaso de todas las instituciones -incluido el Ministerio de Igualdad, se entiende-, no hemos llegado a tiempo", reconocía la secretaria de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam. La número dos del ministerio recomendaba "que se extreme la precaución", mientras Victoria Rosell, delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, recordaba: "En toda la serie histórica, desde 2003 hasta ahora los peores meses son los de julio y agosto, y después los de diciembre y enero, con un repunte muy flagrante en los días festivos". "Es por tanto necesario estar alerta, no bajar la guardia en estas fechas".

Recordar también que recientemente, en relación también a las mujeres agredidas sexualmente, Pam lanzó otro 'contundente' mensaje directamente a los agresores: "Violadores, dejen de violar".

Y entre, mensaje y mensaje, salta al debate público sobre qué esta ocurriendo con la protección a las mujeres. Lo planteó recientemente, María Salmerón, una de las "madres protectoras" de Irene Montero y se cuestiona habitualmente en medios de comunicación y redes sociales. 

Y en estas, interviene el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska para ratificar lo que ya adelantara la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Ángeles Carmona al asegurar que nuestro país es "referente en la lucha contra la violencia machista" y "pionero". Marlaska recordó así que "somos un referente internacional y tenemos un sistema avanzado», a la vez que ha hecho un llamamiento a la sociedad española, quien debe decir "basta". Con ello, ha precisado que "acabar con el terrorismo machista es un objetivo de país, de Estado". Es decir, con un sistema tan innovador, ahora resulta que la que falla es la sociedad española que debe implicarse más en la lucha contra la violencia de género. ¡Acabáramos!