Casi cuatro décadas lleva la Fundación “la Caixa” impulsando y ampliando la formación de jóvenes talentos e investigadores españoles y extranjeros. Y lo hace de la mano del Programa de Becas que echó a andar en 1982 y que, durante todo este tiempo, ha hecho posible que 5.213 personas tuvieran la oportunidad de realizar estudios de posgrado, doctorado o investigación en las mejores universidades y centros del mundo gracias a su apoyo.

“Nos encontramos ante un programa verdaderamente transformador, capaz de cambiar por completo la vida de quienes acceden a la beca al poder formarse en las mejores instituciones. Estamos convencidos de que apostar por estos talentos extraordinarios es fomentar también el cambio y la mejora de la sociedad en su conjunto ya que el avance científico, la investigación y la educación son sin duda el motor del progreso”, afirma Isidro Fainé, presidente de la Fundación ”la Caixa”

La Fundación ”la Caixa” ha destinado una inversión acumulada de 304,8 millones de euros a la formación de estudiantes y al impulso de investigadores

El Programa de Becas cuenta con una reconocida trayectoria y es un referente entre la comunidad universitaria y científica. Es el más importante de los promovidos por entidades privadas de España, tanto por el número de becas convocadas como por el rigor en el proceso de selección, la variedad de las disciplinas y la dotación económica de cada beca. “Yo trabajaba en el diseño y evaluación de procesos de selección y promoción de líderes, así que tengo experiencia identificando cuando un proceso está bien diseñado y cuando no. Creo que en eso hay que darle mérito a la Fundación, porque ha tratado de diseñar un proceso justo, imparcial y transparente. Además, financia un rango muy diverso de disciplinas, al contrario que otras becas disponibles en España”, nos cuenta Sara Estévez, que actualmente está cursando la beca en el Reino Unido, en concreto, en el departamento de Psicología y Ciencias del Comportamiento en la London School of Economics and Political Science (LSE).

El currículum de Sara (Vigo 1993), es impresionante. En 2013 obtiene el título de licenciada en Psicología y Ciencias Políticas por la Scripps College de Claremont (California). En paralelo, la primera beca de emprendimiento del Scripps College al mismo tiempo que ejerce como asistenta de investigación en el laboratorio de estrés, emoción y salud física de la Universidad de California-Irvine. Entre 2014 y 2015 cursa un máster en Psicología y Psiquiatría Organizacional en King’s College de Londres. Entre 2015 y 2018 trabaja como psicóloga organizacional en el área de la Bahía y en Pittsburgh. A finales de 2018 obtiene un puesto como desarrolladora de líderes en Metro Bank (Londres). En septiembre de 2019 comienza sus estudios de doctorado en la London School of Economics. “Estoy en el segundo año del doctorado. En marzo presento la tesina para conseguir el Master de Filosofía que se obtiene de camino a conseguir el doctorado en Filosofía”.

SaraEstévez

-¿Por qué optaste a la beca de la Fundación “la Caixa”?

Quería realizar un proyecto de investigación en España. Llevo prácticamente la mitad de mi vida viviendo fuera y estaba interesada en hacer algo que me trajera de vuelta. Las universidades británicas tienen fondos muy limitados para los estudiantes de doctorado y presentar un proyecto de investigación en territorio español al Consejo de Investigaciones Económicas y Sociales (ESRC) británico me pareció poco probable de salir adelante. Es verdad que sí han financiado proyectos en otros países, pero tienes que argumentar cómo tus resultados van a ser de beneficio para Reino Unido. En aquel momento, no tenía ninguna argumentación que me pareciera suficientemente coherente. Así que opté por buscar financiación en España. La Fundación “la Caixa” es una institución muy reconocida aquí y su programa de becas está muy profesionalizado.

-¿En qué consiste la beca?

La beca cubre -principalmente - dos gastos importantes durante los estudios. El primero son las tasas de la universidad, en mi caso estas tasas son de £4.327 (4.822,559 euros). El segundo es la asignación mensual, que para Reino Unido es de £1.300 (1.418 euros) durante dos años. Te dan también algo de dinero para el viaje al país de destino y al final de los estudios. En mi caso, la parte financiera ha sido importante, pero incluso más importante creo que ha sido el hecho de que una institución como “la Caixa” apoye mi proyecto de investigación. Decir que “la Caixa” te financia te da legitimidad como investigadora cuando estás haciendo investigación ‘de campo’, especialmente en España.  

Mi proyecto usa métodos etnográficos e involucra pasar períodos largos en Polígono Sur, Sevilla

-¿Hubiera sido posible costearte los estudios sin esa ayuda?

Bueno de hecho, esa era mi idea inicial. Ya había hablado con mi empresa para trabajar tres días a la semana y estar en la universidad dos. Se portaron muy bien conmigo porque me ofrecieron dos años sabáticos en vez de uno que es el estándar. En aquel momento me parecía totalmente normal y razonable financiarme mis estudios así. Ahora lo pienso y creo que hubiese sido una locura. Mi proyecto usa métodos etnográficos e involucra pasar períodos largos en Polígono Sur, Sevilla. Creo que hubiese sido imposible coordinar mis estancias en Sevilla con mi trabajo corporativo. Tengo muchos/as compañeros/as que sí se están financiando los estudios ellos mientras trabajan, pero hacen proyectos de investigación en espacios corporativos. Eso hubiese sido una ruta más fácil; diseñar un proyecto de investigación con la empresa con la que estaba trabajando. Pero estaba más interesada en entender lo que estaba pasando en España con el tema del desempleo. Me parece súper importante la financiación de proyectos como este, porque sin financiación es más difícil que se lleven a cabo.   

-He leído el proyecto que presentaste para optar a ella sobre precariedad laboral y las respuestas ‘fallidas’ de las instituciones con efectos perjudiciales. ¿Por qué te preocupa especialmente este tema?

Es una motivación muy personal. Yo me fui de España en 2007. En 2008 hubo la crisis financiera y yo estaba totalmente en una burbuja. Pero familiares y amigos de familiares, no. A partir de ahí he visto como mi vida y las vidas de amig@s que se quedaron en España divergían. El apogeo llegó cuando estaba trabajando en San Francisco en una consultoría de liderazgo. Tenía muchos amig@s trabajando en las grandes empresas tecnológicas -Google, Facebook, Apple, etc.- que vivían unas vidas muy cómodas lado a lado con personas que luchaban por sobrevivir en el día a día. San Francisco es así. Una ciudad de extremos en la que la desigualdad es claramente visible. Es algo que me hacía sentir muy incómoda y algo que me preocupaba. Y luego también tenía esa pregunta de ¿qué va a pasar en España cuando lleguen los cambios -no sé si se puede realmente decir avances- que se están haciendo aquí? Ahora lo vemos claramente, aquellos que trabajan para las grandes empresas tecnológicas han podido seguir con sus vidas desde casa y los ‘gig workers’ han estado expuestos física y económicamente al Covid.

La beca cubre, principalmente, dos gastos importantes: las tasas de la universidad y la asignación mensual

- Tu estudio está enfocado, textualmente, en cómo un grupo marginado e históricamente oprimido, los gitanos, responden a intervenciones de integración social en un pequeño barrio de Sevilla, ¿no es así?

En realidad, mi estudio está centrado en la marginalidad urbana, a través del caso de Polígono Sur. Hay artículos de investigación sobre casos por la mayoría de países Europeos, en Estados Unidos y en Australia. Obviamente cada territorio presenta singularidades resultado de los legados históricos del país en que se da. Sin embargo, todos los territorios tienen unas características en común y Polígono Sur no es excepción. ¿Qué hace que Polígono Sur sea un caso tan interesante? Pues el haber tenido un movimiento asociativo muy fuerte -que continua a día de hoy- , la creación del Comisionado en 2003, y la cantidad de dinero público y privado que se ha invertido en ‘cambiar’ la situación del barrio. ¿Cómo es posible que la situación no mejore? Mi estudio no trata de averiguar si las políticas de intervención funcionan o no, sino que se centra en entender cómo la gente sobrevive en su día a día y resiste la marginalidad. Es intentar ver la problemática de la marginalidad desde abajo en vez de desde arriba.

-¿Cómo es tu día a día cuándo realizas el trabajo de campo?

¡Es fascinante y agotador al mismo tiempo! Es la primera vez que hago una investigación de campo -todas mis anteriores investigaciones fueron experimentales-.  Los días haciendo trabajo de campo son muy variados, no hay dos iguales. Hay una serie de proyectos de intervención que estoy siguiendo y por lo tanto trato de tener un día a la semana de observación con ellos. Después, dependiendo de la disponibilidad de las personas, voy de aquí para allá haciendo entrevistas. Cuando me quedan huecos libres trato de pasear por el barrio, andando, en bici, en bus, en coche y observar cómo se siente dependiendo de donde y como me muevo. Son 145 hectáreas, no es un sitio pequeño. La etnografía requiere hacer notas detalladas de lo que observas y escuchas, por lo tanto, siempre tienes que estar muy atenta. Los días son largos porque durante el horario ‘laboral’ te dedicas a las observaciones y entrevistas y por las noches a escribir sobre ellas.

Clúster de excelencia

Sara Estévez forma parte de la Asociación de Becarios de ”la Caixa”, una comunidad que se ha convertido en un clúster de excelencia compuesto por profesionales de todos los ámbitos que son auténticos referentes en sus campos.

Un momento de una ceremonia de entrega de becas

Es el caso del informático, físico y filósofo Sergio Boixo, que ha liderado en Google un hito histórico de la tecnología al diseñar y dirigir una computación cuántica capaz de reducir a minutos cálculos que requerirían siglos. O el de la economista Mar Reguant, que ha sido elegida por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, para asesorar a su gobierno en materia de cambio climático en el marco de un nuevo comité de expertos que abordará cómo será el mundo tras el coronavirus.

El Programa de Becas cuenta con una reconocida trayectoria y es un referente entre la comunidad universitaria y científica

Este programa también ha demostrado que fomentar la movilidad no hace más que establecer puentes entre España y otros países. Así, por ejemplo, la ingeniera química Mercè Balcells trabaja desde hace un par de décadas en el MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts). Balcells codirige el programa MIT-Spain ”la Caixa” Foundation Seed Fund, que fomenta la colaboración entre científicos y estudiantes del Instituto y centros de investigación, hospitales y empresas españolas.

Además, entre el colectivo de becarios también se producen numerosas sinergias y colaboraciones como la que ha supuesto la creación de la productora de cine, televisión y publicidad La Panda, impulsada por cineastas españoles afincados en Los Angeles cuyo objetivo ayudar a otras productoras de nuestro país a abrirse camino en Hollywood.

Estos son algunos de los ejemplos de cómo el programa de Becas de la Fundación “La Caixa” mantiene intacta su filosofía de partida: “facilitar oportunidades a jóvenes talentos para que puedan desarrollarse y dar lo mejor de sí mismos en beneficio de toda la sociedad”.

Desde el inicio, la Fundación ”la Caixa” ha destinado una inversión acumulada de 304,8 millones de euros a la formación de estudiantes y al impulso de investigadores. En su primer año, el programa contó con una dotación de 368.000 euros. La inversión por parte de la Fundación ”la Caixa” en la convocatoria del año 2020 ha sido de 29,7 millones de euros.