
Hispanidad recogió el reciente ataque que había sufrido el pasado 7 de octubre el convoy en el que viajaba el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, del que salió ileso.
Ese 7 de octubre, Noboa había decretado el estado de excepción en 10 de las 24 provincias del país, para hacer frente a las protestas protagonizadas por grupos izquierdistas e indigenistas, que se oponen a la supresión del subsidio al diésel y a otras iniciativas económicas del Ejecutivo, como su ofensiva militar contra la minería ilegal. El estado de excepción se extenderá durante un total de sesenta días. Los disturbios, que comenzaron el pasado 22 de septiembre, han dejado un manifestante muerto por un disparo y unos 150 heridos entre civiles, policías y militares y cerca de un centenar de personas apresadas.
Poco después, el Gobierno de Ecuador llegó a un acuerdo con los indigenistas que protagonizaban las protestas contra las políticas de Noboa, un acuerdo que no fue secundado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, la más grande y que había convocado el "paro nacional indefinido". Durante las protestas hubo dos muertos.
A todo ello hay que sumar que hace casi dos años que el presidente Noboa calificó como terroristas a las narcobandas criminales más poderosas y ordenó que los militares ayudasen a la policía en labores de seguridad.
Y en este contexto, la Casa Militar Presidencial investiga un supuesto intento de envenenamiento a Noboa, que habría tenido lugar el pasado 17 de octubre, en la ciudad de Babahoyo, en la provincia de Los Ríos.
El equipo del presidente ecuatoriano recibió una cesta con comida y cuando el círculo de seguridad procedió a examinarla, descubrió veneno -cloruro de tionilo, cloroetanol y antraceno- en algunos de los productos.
“El Grupo de Seguridad Técnica Presidencial, cumpliendo los protocolos de seguridad de altas dignidades, ejecutó el análisis químico de todos los regalos a ser entregados, garantizando la seguridad al recibir cualquier tipo de sustancias líquidas y sólidas antes de ser entregados a las principales autoridades”, precisó la Casa Militar Presidencial en el informe.
En este momento, se investiga quién entregó la cesta de la comida.
La pregunta ahora es: ¿van a por Noboa por ser de derechas o por su lucha contra el crimen organizado... o por ambas cosas?












