El objetivo principal de la ley de Seguridad Ciudadana era tratar de mantener el principio de autoridad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
¿Se acuerdan de aquello que dijo Pedro Sánchez en una entrevista: "con Bildu no vamos a pactar, si quiere se lo digo cinco veces o veinte"?
Se trataba de una nueva mentira -"cambio de opinión", en su jerga eufemística-, de la que han nacido acuerdos con la coalición en la que se integran los herederos de Batasuna, brazo político de ETA, acuerdos de los cuales ayer supimos el último eslabón: el pacto de Sánchez con EH Bildu para reformar la Ley de Seguridad Ciudadana.
Como se recordará, la reforma de la ‘Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana’ -bautizada despectivamente como 'ley Mordaza' por la ultraizquierda-, que aprobó en 2015 el Gobierno de Mariano Rajoy para proteger a los agentes del orden -policías y guardias civiles- de las humillaciones a los que les sometían los perroflautas de turno, finalmente no salió adelante en la pasada legislatura por desavenencias entre los partidos izquierdistas (en concreto, por el desacuerdo con la reforma de ERC y Bildu, cuyas enmiendas fueron rechazadas en el texto final). El objetivo principal de esa ley era tratar de mantener el principio de autoridad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Pero EH Bildu -insistimos, la coalición en la que se integran los herederos de Batasuna, brazo político de ETA- la tenía entre ceja y ceja, precisamente por su odio a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Y ayer, consiguió esa nueva cesión de Sánchez a cambio de apoyar los presupuestos, aunque todavía falta su tramitación y los apoyos de Junts y Podemos, que no lo tienen claro.
Pero las cesiones principales a EH Bildu por parte de Sanchez han sido, por un lado, la retirada de las pelotas de goma que se sustituirán, "progresivamente" por "otros (métodos) menos lesivos".
También consiguen los batasunos que el insulto o desobediencia a las autoridades quede libre de sanción si el acusado se retracta o disculpa. Además, la desobediencia pasará de infracción grave a leve, por lo que la multa máxima será de 600 euros y no de 30.000, como hasta ahora.
Y también han logrado los herederos de ETA de Sánchez su promesa -mucho confían en él- de acabar con las devoluciones de migrantes en caliente, que afectan principalmente a las fronteras de Ceuta y Melilla, mediante la reforma de la Ley de Extranjería que deberá estar hecha en un plazo de seis meses.
El rechazo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a este anuncio de reforma de la 'Ley de Seguridad Ciudadana' no se ha hecho esperar, dejando claro su descontento con el Gobierno de Pedro Sánchez y Fernando Grande Marlaska, que viene de lejos...
Lo expresaba así, hace unos días, este agente de la Policía Nacional, delante del ministro del Interior: “Nos quitan cada vez más autoridad para dársela al criminal. ¿Por qué no quieren acabar con el mal y sí destrozar al bien? Alguna vez esto debe cambiar”.
🔴Un agente de la Policía Nacional le pinta la cara a Grande Marlaska en una entrega de premios en Madrid: “Nos quitan cada vez más autoridad para dársela al criminal. ¿Por qué no quieren acabar con el mal y sí destrozar al bien? Alguna vez esto debe cambiar”. pic.twitter.com/uGn78VZcgd
— Sr.Liberal (@SrLiberal) October 2, 2024
Desde el sindicato Jusapol decretaban 'Alarma nacional' y expresaban que constituye un "golpe a policías y guardias civiles que sufren más de mil agresiones al mes".
🔴 #ALARMA_NACIONAL
— jusapol (@jusapol) October 3, 2024
Ante el peligroso y nefasto acuerdo para reformar la Ley de Seguridad Ciudadana entre PSOE y su socio los proetarras de Bildu.#NoALaInseguridadCiudadana
Golpe a policías y guardias civiles que sufren más de mil agresiones al mes.
https://t.co/a24VteNxJu
Mientras que desde el sindicato Jupol comentaban que el anuncio de reforma de la ley "la sido una puñalada bilduetarra".
Ley de Seguridad Ciudadana. JUPOL: "Ha sido una puñalada bilduetarra" https://t.co/YnRi6T4Q3c vía @eltorotv #NOAlaInseguridadCiudadana
— JUPOL (@JupolNacional) October 4, 2024
Por su parte, la Asociación Unificada de la Guardia Civil lo resumía así: "De quienes tienen odio a las FCSE no podemos esperar otra cosa. Continúa la máquina del blanqueamiento".
De quienes tienen odio a las FCSE no podemos esperar otra cosa. Continúa la máquina del blanqueamiento. pic.twitter.com/2Tj224uv6s
— AUGC Guardia Civil 🇪🇸 (@AUGC_Comunica) October 3, 2024
La AUGC emitía este otro post: "Los agentes necesitan herramientas para que puedan realizar su trabajo con seguridad en un momento en el que las agresiones no paran de aumentar año tras año sobre los guardias civiles. Para AUGC es urgente reforzar el principio de autoridad y realizar las modificaciones necesarias en el código penal para endurecer las penas por agresión sobre los agentes con el fin de reforzar el principio de autoridad".
#ÚLTIMAHORA Ley Seguridad Ciudadana. Los guardias civiles no pueden trabajar en las calles sin principio de autoridad.
— AUGC Guardia Civil 🇪🇸 (@AUGC_Comunica) October 3, 2024
El gobierno no puede seguir utilizando a los guardias civiles como moneda de cambio dejándoles atados de pies y manos en su trabajo.
Los agentes necesitan…
En cualquier caso, lo más grave de todo esto es que Pedro Sánchez pacte una reforma de la ley de Seguridad Ciudadana, que afecta a policías y guardias civiles, con los herederos de Batasuna-ETA, que hasta hace no mucho eran sus propios verdugos.
Pedro Sánchez no tiene límites éticos ni morales. Pero esto ya no es noticia...