Donald Trump no es, precisamente, una hermanita de la caridad, pero su gestión en materia internacional fue buena. Uno de los pocos presidentes de Estados Unidos que no ha comenzado ninguna guerra. Por tanto, conviene escucharle aun en su remoquete:  advierte Trump del peligro cierto de una III guerra mundial y encima asegura que sería una guerra de aniquilación. Eso sí, su remoquete, que Donald no da puntada sin hilo, es que, para afrontar la situación, al frente de Estados Unidos bosteza un anciano senil que no sabe salir de un escenario porque nunca se acuerda de por dónde ha entrado.

También ha hablado el presdiente ucraniano Zelensky -por cierto, es judío- quien ha acusado a Rusia de estar detrás del ataque de Hamas a Israel que, en un primer momento, fue todo un éxito. Macabro, pero éxito.  Dicho de otra forma: ¿cómo logró un grupo terrorista traspasar una de las fronteras más vigiladas del mundo por parte de uno de los ejércitos más experimentados del mundo? ¿Previo ataque cibernético de Putin y bloqueo de las defensas hebreas?

Y esto en unos tiempos en los que la diplomacia mundial ha dejado de servir. No lo digo yo, lo dice el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin. Sí, a lo mejor Trump no va desencaminado.

El secretario de Estado vaticano Parolin dice otra gran verdad: en 2023 la diplomacia ya no sirve

Moscu y Pekín no han condenado el ataque de Hamas, Irán no solo eso: les ha felicitado, Arabia no lo ha hecho, pero no porque le preocupen los israelíes sino porque donde este Irán, Arabia está enfrente.

Más reaccioines. El popular líder salvadoreño Nayib Bukele: «Como salvadoreño con ascendencia palestina lo mejor que le podría pasar al pueblo palestino es que Hamás desapareciera... Esas bestias salvajes no representan a los palestinos", aseveró el mandatario salvadoreño. Al menos, Bukele habla claro. 

Todo Occidente apoya a Israel tras contemplar a los milicianos palestinos arrastrar como si se tratara de ganado a una chica en una furgoneta, desnuda, en una postura grotesca, no se sabía si muerta o viva, a la que los chavales palestinos palestinos escupían con desprecio. 

 

Todo Occidente condena a Hamas… menos Podemos, Más País, y otras organizaciones comunistas españolas y francesas. Es más, en su primera reacción, Pedro Sánchez evitó el término terrorismo, pero luego, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, acuñó el concepto y ya todos los sociatas lo repitieron, incluida Presidencia. A Yolanda Díaz no se le ocurrió nada bello que decir y corrió a esconderse, mientras su portavoz, Ernest Urtasun, cada día más cerca del ridículo, se esforzaba por establecer una imposible equidistancia entre israelíes atacados y un Hamas atacante. Iñigo Errejón, Enrique Santiago, las podemitas inteligentes, como Isa Serra, etc, se lanzaron a la defensa de los palestinos salvajes. con más o menos matices pero en su defensa.

El asunto tiene tela pero a Sanchez le es igual: se trata de gobernar aunque sea con el demonio. Ya sólo falta que Nrtanyahu también apoye a Hamas y a Hezbolá.

Casi todo Occidente apoya a Israel… menos los socios de Gobierno de Sánchez: Sumar, Podemos, Más País, etc. Esto marcha

En cualquier caso, lo de Trumpo es lo más relevante: ¿estamos próximos a una posible III guerra mundial? Sí, lo estamos.