• Sin tele, desmercantiliza la fiesta… y la demuestra rentable.
  • Y a los animalistas les lanza un mensaje muy simple: los animales y el planeta Tierra han sido creados para provecho del hombre.
  • Y esto porque hablamos del único ser libre de la creación y, encima, hijo de Dios.
  • Por otra parte, la lidia es cultura y arte. Cultura porque ha creado un lenguaje.
  • Arte, porque un artista no es más que un artesano inteligente. Hay que ser muy inteligente para enfrentarse a una fiera con un trozo de trapo.

La lidia, el toreo, es cultura y es arte. Cultura porque ha creado un lenguaje. La cultura no es moda, ni gastronomía, ni costumbres, ni tan siquiera historia. Cultura es lo que crea un lenguaje propio. El toreo ha creado un lenguaje propio, rico e intuitivo, conocido y comprendido por mi padre, que no fue a la escuela sino hasta los ocho años, mucho mejor que por mí. Y el toreo también es arte, porque un artista no es más que un artesano inteligente. Hay que ser muy inteligente para enfrentarse a una fiera con un trozo de trapo. José Tomás (en la imagen) se la juega cada tarde ante el toro. Y entonces desarma a los animalistas, porque les demuestra que en el buen toreo no hay trampas: el diestro se juega la vida. Al menos, si realmente quiere jugársela. José Tomas sí se la juega y sigue siendo la imagen del hombre que con un trozo de trapo se enfrenta a una fiera a la que los romanos hacían pelear en el circo frente al león… y solía ganar el toro ibérico. Y es un arte… porque hay que ser un gran artesano. Un verdadero artista para enfrentarse a la fiera. El maestro José Tomás ha demostrado algo más: la tele no es invencible. Ha desmercantilizado el toreo y, de paso, demostrado que al toro hay que olerlo, hay que verlo en la plaza, porque no es un ente catódico sino un animal vivo y muy bravo. Pero el principal error de los animalistas es equiparar al hombre con el resto de especies animales y hasta vegetales. En breve con las piedras y demás seres inanimados, no lo duden (¿acaso no se ha convertido en delito coger una piedra de una cantera?). Se han invertido los términos: el hombre, único ser creado libre e hijo de Dios, es el dueño y señor de la creación: animales, plantas, el planeta entero, está a su servicio. El toro bravo también. ¡Que viva José Tomás! Eulogio López eulogio@hispanidad.com