- Por la vía catalana, claro está.
- El PSOE va cediendo, sin mucha resistencia, a las proposiciones de Pablo Iglesias.
- Y Podemos se convierte en el portavoz del separatismo.
- Urkullu pide ahora un referéndum para Cataluña y otro para Euskadi.
- El único camino que le queda a Rajoy es hacia delante, no hacia atrás.
No se dejen engañar por las entrevistas de
Pedro Sánchez y Albert Rivera en Moncloa, con
Mariano Rajoy. Lo cierto es que el PP ya es consciente de que ha dejado que la desfachatez separatista llegue
demasiado lejos.
El 2 de octubre que va después del 1, ha configurado el plan de
Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. O mejor, el plan que puede llevar a los
comunistas de Podemos al poder en España.
En
Hispanidad lo hemos comentado muchas veces: se trata de tensar tanto la cuerda en Cataluña que posibilite una moción de censura de socialistas, comunistas (PSOE) y separatistas,
tanto vascos como catalanes.
Con ello, llegar a un gobierno donde el presidente sea
Pedro Sánchez y el que mande sea
Pablo Iglesias.
Sea como fuere,
si en el medio hubiera revolución callejera, pues qué le vamos a hacer. Al final, se trata de que Pablo Iglesias y los neo-comunistas lleguen al poder.
En ese proceso
el PSOE va cediendo, sin mucha resistencia, a las proposiciones de Pablo Iglesias.
Y
Podemos se convierte en el portavoz del
separatismo catalán y, si puede, hará lo mismo con el vasco.
Como éramos pocos, la abuela se dedica a coquetear:
Urkullu pide ahora un referéndum para Cataluña y
otro para Euskadi.
Ahora, el único camino que le queda a Rajoy es hacia delante, no hacia atrás. Incluso puede que llegue tarde a la aplicación del artículo 155.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com