- El caca-culo-pedo-pis del PSOE: eutanasia, acabar con la religión en las escuelas y sustituirla por educación para la ciudadanía y cargarse los colegios cristianos.
- Cataluña sólo será la espoleta, pero el PSOE será el eje del enfrentamiento civil.
- Y recuerden que el conflicto de 1936 comenzó cuando los militantes socialistas se convirtieron en milicianos.
- No queremos aislar al Gobierno de España, asegura Pedro Sánchez.
- Pero vuelve al Estatuto de 2006.
- Y reitera que no hay que hacer frentes… pero no abandona la tentación frentepopulista.
- Equidistancia: no debe haber ganadores ni perdedores en Cataluña. ¿Seguro?
- Y Puigdemont es malo… pero Rajoy peor.
-
Al tiempo, le dice a Podemos que no apoya la declaración unilateral de Independencia. ¡Menos mal!
Probablemente,
Pedro Sánchez sea el español más insensato de entre los nacidos tras la Guerra Civil. Y muy clarividente: "
Nosotros tenemos un concepto no nacionalista del concepto de nación".
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En la mañana del martes, el secretario general del PSOE
ofrecía doctrina a los diputados de su grupo parlamentario.
En su línea profundísima, lo del martes fue otro recital del caca-culo-pedo-pis. Como ya no se puede llegar más allá de lo que se ha llegado España en materia de aborto y homosexualismo,
Sánchez propone ahora la eutanasia: solucionar el problema de la vejez cargándose a los viejos, inútiles
y débiles varios. Ya saben: para acabar con el hambre matamos a los hambrientos, sobre todo antes de nacer; para poder pagar las pensiones
nos cargamos a los jubilados y se acabó el problema.
Sánchez propone también acabar con las
clases de religión en las escuelas y sustituirlas por
Educación para la Ciudadanía, es decir, el lavado de cerebro progre de los niños que inventara
ZP. Y, naturalmente, terminar con los colegios privados. Es decir, con los
colegios católicos.
Y todo esto en vísperas del 1 de octubre.
Cataluña sólo será la espoleta, pero el PSOE será el eje del enfrentamiento civil.
Pedro Sánchez colabora con entusiasmo a ello: no sabe lo que está haciendo porque no sabe lo que está deshaciendo.
Recuerden que el conflicto de 1936 comenzó cuando los militantes socialistas se convirtieron en milicianos.
"No queremos aislar al Gobierno de España", asegura Pedro Sánchez, pero expone el mismo argumento de los separatistas: todo empezó con el agravio enorme del PP al
Estatut en 2006, que impugnó ante el Tribunal Constitucional… y el TC lo declaró anticonstitucional.
En su versión
Doctor Jekyl, Sánchez reitera que
no quiere hacer frentes… pero no abandona la tentación
frentepopulista. Y practica la equidistancia: no debe haber ganadores ni perdedores en Cataluña. ¿Seguro?
Y más:
Puigdemont es malo… pero Rajoy es peor.
Al tiempo, le dice a Podemos que no apoya la declaración unilateral de Independencia. ¡Menos mal!
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com