El partido político Vox, que lidera Santiago Abascal (en la imagen), ha pedido el cierre preventivo de la mezquita de la M-30, financiada por Arabia Saudí. Nos gusta la iniciativa pero nos gustaría más que el principio invocado fuera el de la reciprocidad. Es decir, no se trata de un cierre preventivo (que mal suena eso de preventivo) sino de cerrar toda mezquita financiada por aquellos países que no permiten en su suelo la presencia de templos cristianos. No digamos nada Arabia Saudí, donde se persigue con saña criminal a los cristianos: si te pillan con un crucifijo o unos evangelios eres apresado, torturado e incluso puedes ser ejecutado. Ahora bien, si además resulta que, como dice Vox, desde la mezquita madrileña se financiaba el terrorismo islámico, entonces… Hispanidad redaccion@hispanidad.com