No conocía a la entidad sin ánimo de lucro Puertas Abiertas, pero me gusta su ocupación, asaz pertinente: la defensa, especialmente legal, de los cristianos perseguidos. Resulta que el PP ha tenido una buena idea (sí, también el PP puede tener alguna buena idea -de vez en vez- y ha concedido el premio Oswaldo Payá a Puertas Abiertas.
Porque, además, recuerden los dos tipos de cristofobia existentes en el mundo actual:
- La violencia física, estilo Estado Islámico: degollaciones, asesinatos, violaciones y demás.
- En segundo lugar la persecución, habitual en las democracias occidentales, cada vez más cristófobas, donde el empeño consiste en silenciar a los cristianos o en no permitirles expresar su fe según en qué ambientes, especialmente en los ambientes de poder e influencia.