Las empanadillas climáticas de Ribera y Montero...¡Prrrrrrrrrrrrrrrr!
Lo publicábamos en Hispanidad esta misma semana. La aportación del Gobierno español al nuevo Zugarramurdi global ha salido de la boca de doña Teresa Ribera, ministra del Ramo de los augures maléficos lo que se podría calificar, no ya de perla, sino como una empanadilla climática: la lucha contra el cambio en climático pero con perspectiva de género............... Prrrrrrrrrrrrrrrrr. (No sé por qué. pero se me viene a la mente Millán, de Martes y Trece, con su antológico sketch de las empanadillas de Móstoles).
No sé si se habrán dado cuenta de que la mayoría de los desastres climáticos tienen nombre masculino (eso hay que cambiarlo). Y es el varón quien contamina el aire, y obliga a la mujer a respirarlo. Por eso dice la ministra Ribera que las respuestas al cambio climático "requieren un enfoque de género"."Sabemos que las mujeres y niñas son más vulnerables a los impactos del cambio climático, y están infrarrepresentadas en la toma de decisiones para combatirlo, de ahí esta iniciativa para empoderarlas y eliminar las barreras para su participación en sectores que son clave para solucionarlo como la energía, la salud, la agricultura, o la educación", ha recalcado Ribera.
Ribera, no estas sola. Irene Montero te apoya desde su vivienda de Galapagar. La portavoz de Unidas Podemos aplaude a Greta Thunberg y propone… -redoble de tambor- blindar el planeta modificando la Constitución. Oh, my God!
Como si se tratara de una nueva modalidad de desastre ecológico, a Montero le ha caído encima una lluvia de tweets de lo más variado.
Hoy @GretaThunberg nos ha recordado que ya no es tiempo para la esperanza, es tiempo para la acción.
— Irene Montero (@Irene_Montero_) September 23, 2019
No podemos traicionar a las futuras generaciones. Debemos estar a la altura y, por eso, hoy hemos propuesto #BlindarElPlaneta en nuestra Constitución.
¡Qué injusticia! Ribera y Montero, la sociedad no entiende que vosotras sois quienes marcáis el camino en la lucha contra la emergencia climática… Siempre con permiso de Greta.