Eso sí, no parece que FG esté en campaña de cómo hacer amigos. Así, mientras el poderoso ministro de Trabajo, Jesús Caldera, pretende acabar con las prejubilaciones, el sindicato Comisiones Obreras cree que el banco prejubilará a 1.500 empleados en 2004, además de otros entre 750 y 1000 empleados más el próximo año, este último tramo siempre que el Banco de España les autorice a cargar el coste de esas prejubilaciones contra reservas.
No, Caldera no debe estar muy contento con FG.