El presidente de la Compañía, el único español miembro del equipo de Dirección de VW, Francisco García Sanz, insiste en las críticas de Erich Schmitt a la competitividad española. Eso sí, García reconoce que SEAT debe sacar más modelos o fracasará. Por el momento, no hay opción de compra española, pero sí surge, La Caixa ya advierte que no participará en la misma aunque atenderá una petición de financiación como con cualquier otro cliente
Esta vez ha sido Francisco García Sanz, presidente de SEAT y el único español miembro del Comité de Dirección de la multinacional alemana Volkswagen. García ha insistido en la misma música del CEO de SEAT, el alemán Erich Schmitt y amenaza a la factoría de Martorell (14.000 empleados) con nuevos ajustes y con su propia continuidad si no mejora la productividad, al tiempo que critica con aspereza a los sindicatos.García habló de sindicatos tercermundistas, precisamente una compañía acusada de fletar aviones llenos de sindicalistas a Brasil para pagarles servicios de prostitutas. Claro que eran sindicalistas alemanes y prostitutas brasileñas.
De hecho, el nuevo sueño de Schmitt consiste en fabricar coches SEAT en China, donde, muy cierto, los trabajadores cobran mucho menos que en España.
Pero lo más grave es la amenaza latente, siempre repetida, realizada por una empresa que no ha dotado a SEAT de los medios necesarios para repuntar pero que, eso sí, ha vivido de subvenciones españolas, tanto de la Administración central como de la administración catalana.
En otras palabras, Volkswagen le ha quitado a SEAT la bombona de oxígeno y ahora dice que se ahoga. Eso sí, el propio García Sanz reconoce que SEAT necesita nuevos modelos. No es mal reconocimiento, aunque un tanto tardío.
Mientras tanto, la opción española, que siempre ha patrocinado la Generalitat, para comprar SEAT en el caso de que VW pretenda cerrarla, no contará con La Caixa como socio, aunque sí, naturalmente, como financiador. En la entidad catalana no se tiene la menor intención de ponerse a fabricar coches pero aseguran que si un consorcio se quiere hacer con SEAT y viene a solicitar financiación se le atenderá "como a cualquier otro cliente".