Para Toxo la prioridad está en el sistema financiero. Si no se hacen las reformas globales en el G20, volveremos a repetir los mismos problemas. Y de momento no es muy optimista y considera que la reforma ambiciosa se ha quedado en agua de borrajas. A nivel doméstico considera que también la prioridad está en la reforma del sistema financiero para recuperar la actividad crediticia y critica las hostilidades de los gobiernos autonómicos.
En cuanto a las negociaciones laborales, censura el ruido externo de las empresas de Ferrán y señala que no es el mejor acompañamiento. Por eso pide interlocutores sólidos y fiables. No está claro si habrá acuerdo en abril, pero sí que defiende el modelo austriaco del que MAFO es defensor. El paradigma de la flexiseguridad.
Sobre el plan de austeridad, se muestra contrario: no es el momento de retirar los estímulos fiscales, generará más problemas que soluciones, en su opinión. Toxo considera que hay margen para subir más el IVA y para recuperar Sucesiones y Patrimonio, aunque reconoce que no es el mejor momento. Entre otras cosas porque dispararía la economía sumergida que -reconoce- se ha disparado en el último año por encima del 20% a pesar de lo que diga el Gobierno.
