El canal se ha convertido en un saco de pérdidas, bajo la errática gestión de Carlos Barba
Era una de las grandes apuestas de Tele 5 para Estados Unidos: una alianza entre Berlusconi y Burillo Azcárraga -el ex accionista de Televisa, primo de Emilio Azcárraga Jean- para entrar en el difícil mercado de la TV americana en castellano. Canal en Florida, en Nueva York y en Puerto Rico, con posibilidades en California y Chicago. El asunto prometía. Azcárraga se hizo con el 40% y Tele 5 con el 30%, además de controlar la gestión. Siendo que la normativa USA impone que sea un norteamericano el principal accionista se fichó a Carlos Barba. Con él, los dos principales socios no han hecho otra cosa que perder dinero y cubrir ampliaciones de capital (la última en agosto, con 215 millones de dólares que ya se ha gastado, necesitan otros 20 para terminar el año) y con una audiencia por debajo del 1%.
Barba se ha comido crudos a los 3 directivos enviados por Tele 5 para poner orden, mientras Burillo Azcárraga reclama al mismísimo Silvio Berlusconi que tome cartas en el asunto, y éste reclama a Paolo Vasile que haga algo. Claro que, como confiesa el propio Berlusconi, sin despeinarse, en España no le hacen ni caso.
Era lo único que le faltaba a Tele 5, con una cotización por los suelos y perdiendo audiencia para engolfar aún más su balance: Caribe Visión. Atrás han quedado los Días de la Hispanidad, celebrados por todo lo alto en Nueva York. Ahora, de lo que se trata es de poner orden en una filial que amenaza con convertirse en un problema económico muy serio.
