• Seguimios siendo un país de sueldos bajos e impuestos laborales altos.
  • Y, encima, la subida del IRPF ha sido todo un hachazo para la renta real de las clases medias.
  • El coste laboral por trabajador y mes se situó en 2.455,49 euros en el tercer trimestre, lo que supone un descenso del 0,1% respecto al mismo periodo de 2011.
  • Eso es así porque bajaron ligeramente los costes no salariales (0,9%) mientras que los costes salariales aumentaron (0,3%).
  • Del coste total por trabajador y mes, 1.805,63 euros corresponden a salarios brutos y 572,25 a cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social; el resto es para indemnizaciones o prestaciones sociales.
El coste laboral de las empresas por trabajador y mes se situó en 2.455,49 euros en el tercer trimestre, lo que supone un descenso del 0,1% respecto al mismo periodo de 2011, casi imperceptible.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), de dicho gasto, el coste salarial (que incluye salario base, complementos, pagos por horas extraordinarias y atrasos, todo medido en términos brutos) se situó en los 1.805,63 euros por trabajador y mes de media, el 0,3% más.

Del coste total por trabajador y mes, 1.805,63 euros corresponden a salarios, 572,25 a cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social y el resto es para indemnizaciones o prestaciones sociales, entre otros gastos.

Los otros costes, no salariales, bajaron el 0,9% hasta 649,86 euros, porque su principal componente, las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social cayeron el 0,4 % hasta los 572,25 euros, mientras que las percepciones no salariales lo hicieron un 9,3%, hasta 91,71 euros, debido al descenso de las indemnizaciones por despido y de otras percepciones no salariales.

No obstante, como explicamos recientemente, España se caracteriza por tener sueldos más bajos que en la mayoría de los países europeos, y unos impuestos laborales superiores, proporcionalmente, a los de nuestros homólogos europeos, acentuados por las últimas políticas de Rajoy: bajada de sueldos -de los funcionarios, por ejemplo- y, al mismo tiempo, subida de los impuestos laborales. Así que este último dato del INE sobre los costes laborales quiere decir que todo sigue igual.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com