Si la OPA de Gas Natural sobre Endesa fracasa, Iberdrola tendrá que mover pieza. Sin embargo, su consejero delegado, Ignacio S. Galán, insiste en que continuarán con su crecimiento orgánico, que ha conseguido duplicar el valor de Iberdrola hasta los 24.000 millones de euros.
De hecho, con motivo de la Junta General de Accionistas que se celebra mañana jueves en Bilbao, Galán hizo un repaso francamente triunfal del último quinquenio de la Compañía, que por pura coincidencia es el tiempo que él lleva como primer ejecutivo de la misma.
Es cierto que es un gestor duro, y que no tiene ningún reparo en alabarse a sí mismo, pero hay que reconocer que ha hecho una beuna función en una compañía que, como él dijo en cierta ocasión y luego tuvo que negarlo- parecía dormida.
Su periodo se ha distinguido, además, por un crecimiento sostenido, y por un fuerte ritmo inversor. Y todo ello reduciendo deuda y sin acudir a la ampliación de capital, Por último, y no es lo menos importante, ha conseguido introducir a las cajas de ahorros en su accionariado. Es decir, ha conseguido introducir en el Consejo al mejor accionista, el que menos da la lata, y uno de los más estables y formales.
Además, Galán se ha hecho con la lealtad de los directivos. Es exigente pero paga bien a los suyos. En la mañana del miércoles, y antes de comparecer ante los medios informativos, Galán exhortaba a sus mandos: Hay que empujar. Uno de los ejecutivos preguntaba a su compañeros de silla: ¿Qué quiere decir eso?. A lo que el aludido y citamos textualmente-, respondió: Empujar quiere decir follar. ¿Y por qué dice eso? -inquiría, no sin razón, el primero. En defensa de los directivos de Iberdrola, hay que decir que ninguno especificó el objetivo del empuje, que, a la postre, no era más que una imagen comercial. Ya saben: empujar las ventas.
Dicho esto
Llama la atención que el Consejo pedía permiso a la Junta de Accionistas para realizar ampliaciones de capital obligando al accionista a renunciar al derecho de suscripción preferente, precisamente una de las cuestiones que más perjudican al pequeño accionista y que, aunque casi legales en España desde la reforma Rato, que beneficia a las cuerpos directivos de las grandes empresas y perjudica a sus pequeños accionistas, han provocado que la Comisión Europea amenace con abrir expediente al Reino de España.
Y también sorprende que Iberdrola se financie (señal de que piensa que la OPA de Gas Natural va a salir adelante y se prepara para comprarle la tercera parte de Endesa) con cargo a participaciones preferentes, una forma de ocular deuda, con una financiación subordinada que tan poco gusta a un sinfín de autoridades, desde el Fisco al Banco de España y no es para menos.
Lo que está claro es que si la OPA fracasa, tanto Endesa como Iberdrola tendrán que moverse, y rápido. De crecimiento orgánico, nada de nada.
Por cierto, Galán no quiso responder a la pregunta de un periodista sobre si nombraría un consejero delegado cuando acceda a la Presidencia. La respuesta es sencilla: No. Al menos durante el primer año, Galán gobernará en solitario Iberdrola. Y como recuerda el propio Oriol, los estatutos de Iberdrola dan mucho poder al presidente.
