- Y otros fondos asiáticos que aporten capital a Bankia… y a BFA.
- El problema sigue siendo el mismo: Bankia necesita al menos 10.000 millones de euros en nuevo capital pero vale en bolsa 5.200 millones.
- Además, los fondos exigen un esquema de protección de activos (EPA), que es lo que Rajoy se niega a darle.
- Y mientras, Botín sigue esperando el troceo… previa intervención de Bankia, se entiende. Y FG, el presunto amigo de Rato, apoya la jugada, entusiasmado.
Todo país asiático –árabe u oriental- rebosante de liquidez tiene al menos tres fondos soberanos, tres instrumentos financieros gubernamentales: el propio banco central, que es quien interviene en deuda pública extranjera y en valores de referencia, otro fondo para el desarrollo interno, prolongación del presupuesto, y un tercero, el financiero que es el que arriesga, el que compra en el exterior, el brazo armado dispuesto a arriesgar.
Pues bien, este último es el China Investment Corporation (CIC), famoso en España por la excelsa metedura de pata del expresidente Zapatero, cuando anunció que el CIC iba a invertir 9.000 millones de euros en deuda española, así como más dinero en cajas de ahorros… y se topó con el desmentido del Gobierno chino y del propio CIC.
Pues es en el CIC y en otros fondos soberanos asiáticos donde Rato intenta hallar los 10.000 millones de euros que precisa para evitar la más que posible intervención del Gobierno y posterior troceo, que es lo que buscan sus queridos colegas Emilio Botín y Francisco González, esto es el Santander y el BBVA.
El problema, el de siempre: Bankia vale en bolsa la mitad de esa cantidad y el problema no es Bankia, es el BFA, la matriz del Grupo. Por eso, los fondos exigen un esquema de protección de activos, en resumen, que el Estado pague los platos rotos. Naturalmente, Rajoy ya ha advertido que si Rato quiere Esquema de Protección de Activos, es decir, el mismo procedimiento de ayudas públicas empleado en los casos de UNNIM y CAM, el Estado intervendrá Bankia… y Rato saldrá por la puerta de atrás.
Por pura casualidad (sí, palabra que, hasta donde yo sé, es pura casualidad), el ministro de Economía Luis de Guindos, se encuentra en China.
Ni que decir tiene que Rato se resiste al 'ABN' que pretenden hacerle Emilio Botín y su colega y competidor, FG. Por eso busca una inyección de fondos pero sin ayudas públicas, algo bastante difícil en un sector tan especulativo como la inversión bancaria.
Y el tiempo se termina, y la presión aún será más grande cuando Caixa se haga con Cívica… sin ayudas públicas.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com