• Habrá dinero público para salvar a los malos banqueros.
  • Por vez primera, el presidente reconoce la evidencia: habrá dinero público, como ya lo ha habido.
  • En este esquema, Bankia recibirá ayudas para salir adelante.
  • Clamor en el sector: Unicaja rompe toda la arquitectura de la reforma financiera.

Y al final ha dado su brazo a torcer. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (en la imagen junto al Ejecutivo al completo) después de repetir hasta la saciedad que no iba a emplear dinero de los contribuyentes para sanear el sistema financiero -cosa que no es cierta, como hemos venido denunciando desde estas líneas-, ahora ha admitido que, si es necesario, lo hará. "Si es preciso sanear una entidad, lo último que haría es inyectar dinero público; pero si fuera necesario para conseguir el crédito para salvar el sistema financiero, yo no renunciaría -como han hecho todos los países de la UE- a inyectar dinero público", ha afirmado en una entrevista en Onda Cero.

De esta manera, queda claro que Bankia, la entidad con mayores problemas y que está condicionando el futuro de la reforma bancaria, recibirá dinero público para salir adelante. Y esas ayudas, probablemente, traerán consigo un cambio en la gestión de la entidad. Por lo menos, ese es el rumor que circula por la city madrileña durante la mañana de este lunes.

Pero esto no es todo. En el seno del sector financiero hay mucho malestar con Unicaja, porque ha roto con las normas que se venían cumpliendo en las fusiones y adquisiciones de unas entidades por otras. El caso es que la entidad presidida por Braulio Medel se hizo con Caja España-Duero con ayudas públicas, sin que se cumplieran las exigencias necesarias para ello. Claro, esto ha escocido muy mucho entre los que han asumido integraciones sin contar con ese apoyo del Gobierno. Véase, por ejemplo, el Popular con Pastor o la Caixa con Banca Cívica.

Vamos camino de medio año desde la aprobación del decreto Guindos y esto no ha hecho más que empezar.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com