Todo son derechos.
En cuanto a pena de muerte, se lleva la palma China, ese país sobre el que no oirán la menor crítica en Occidente, porque al empresario blanco se le menean las órbitas cuando piensa en un mercado de 1.100 millones de personas que, aunque pobres, manejan mucho dinero.
El 10 de octubre es el Día Europeo contra la pena capital, gracias a Polonia, como siempre, la Unión Europea no ha podido lanzar la muy hipócrita declaración que preparaba contra la pena de muerte, al tiempo que apoya, promociona y financia, el aborto, los embriones cobayas y la eutanasia. Y es que habría sido una declaración un tanto singular, aunque, eso sí, muy habitual.
¿Cómo se puede condenar la pena de muerte contra el culpable y proclamar como derecho la ejecución del inocente e indefenso? Bien estaría aquello sin omitir esto.
En cualquier caso, los polacos han logrado neutralizar al mayor enemigo de los pro-vida: el silencio cobarde. ¡No sé qué haríamos en Europa sin Polonia!
Eulogio López
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