Ante la provocación de los grupos separatistas promovida con motivo de la final de la Copa del Rey que se jugará en el estadio Manzanares de Madrid, estadio que enfrentará este viernes al Athletic de Bilbao y el F.C. Barcelona, y las palabras de la presidenta de esa Comunidad autónoma, Esperanza Aguirre, opino como el presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada: la suspensión de la final de la Copa del Rey de fútbol debería ser el último recurso para evitar posibles incidentes soberanistas durante el partido.
Pienso como Posadas, la medida propuesta por Aguirre sólo debe adoptarse "en última instancia y porque no haya más remedio. No digo que no se haga", puntualizó el presidente, "pero en primera instancia hay que adoptar otras medidas".
No obstante, considero que organizar una reivindicación soberanista a cuenta de una manifestación deportiva "es un error", porque solo contribuye a "exacerbar sentimientos", lo que "no ayuda a comprender las razones del otro".
Con los sentimientos lo peor que se puede hacer es exacerbarlos en una dirección o en la contraria y esto exacerba los sentimientos de separatistas y de separadores. Lo que si cabe exigir a los clubes, de cara a la próxima temporada, es que acepten las reglas del juego o que no participen en la competición.
Desgraciadamente, las palabras del Presidente de Barça tampoco son de recibo. Sinceramente, no ayudan a la concordia ni a la deportividad.
José Morales Martín