En el subconsciente colectivo queda la imagen de la vicepresidenta De la Vega abroncando a la presidenta del Tribunal Constitucional (TC) María Emilia Casas, en pleno desfile de la Hispanidad. La historia se vuelva a repetir. De la Vega se suma a Montilla y a Zapatero para meter más presión al TC en relación al Estatut. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este viernes, señalaba que el Estatut se está aplicando y desarrollando con total normalidad democrática; por lo tanto tiene plena legitimidad. Es verdad que señala que hay que esperar a la sentencia para valorarla y acatarla. Pero también es verdad que sugiere el resultado al apelar a la legitimidad del Estatut y al señalar que la sentencia seguro que será buena y no tardará mucho.