Méndez (UGT) amenaza con "respuestas contundentes" si se abarata el despido

En Tele 5, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha respondido en la misma línea que su homólogo en el cargo en CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ante la posibilidad de realizar movilizaciones: vamos a plantear movilizaciones en unidad de acción para reforzar nuestra posición en el diálogo social y para darle proyección a medidas de reactivación económica, para la protección de los desempleados y para el necesario cambio de nuestro modelo productivo. Y en referencia a las palabras del presidente del gobierno ayer pidiendo esfuerzos y sacrificios a todos, Méndez añadía: lo que sí puedo decir es que los esfuerzos y sacrificios ya los están haciendo las familias trabajadoras españolas y no se les puede pedir ni más esfuerzos ni mas sacrificios. Si al final encuentran eco esas llamadas al abaratamiento del despido o a recortar los derechos sociales, habría una respuesta legítima y muy clara y contundente por parte de las organizaciones sindicales. 
El líder de UGT ha insistido en repetidas ocasiones sobre la necesidad de que el crédito concedido a los bancos llegue a familias y empresas: creemos que la batería de medidas que ha tomado el gobierno, fundamentalmente los 8.000 millones de euros del plan local para reactivar la economía y la inyección de liquidez a los bancos y cajas de ahorros son medidas que van en la dirección correcta. El problema que tenemos es que urge su puesta en marcha. Si a las entidades financieras se les proporciona una cantidad brutal de recursos públicos, con el objetivo de que alivien la situación de las pymes y de las familias, y ese dinero no llega,  la responsabilidad es del gobierno que presentó públicamente esas medidas.  Y ha pedido también a los dos principales partidos que utilicen las cajas de ahorro para luchar contra esta crisis  teniendo en cuenta que las cajas de ahorro acumulan más del 50% de los canales de crédito de este país.
También ha recordado Méndez que el Gobierno ha tomado recientemente la decisión de mejorar la situación tributaria de los ejecutivos y de los consejeros de los bancos, para que paguen menos impuestos: y sin embargo, hay una situación tributaria muy desfavorable para aquellos trabajadores que van al paro, los despiden y cobran una indemnización con unas cargas tributarias injustificables y que habría que aliviar.  

En la tertulia de Intereconomía, los tertulianos comentaban la decisión de la agencia de calificación Standard and Poors, de poner la triple A de la deuda de España bajo vigilancia. Para Álvaro Nadal, secretario de Economía y Empleo del PP, la deuda española está muy mal calificada. De hecho, el bono español a 10 años ahora mismo está pagando más intereses que el bono belga, que no tiene gobierno. Sólo por encima de España están Portugal y Grecia, es decir, volvemos al cajón de siempre y es lo que los mercados están valorando y las agencias de calificación están yendo por el mismo camino. Y añadía que al Tesoro Español no le está siendo fácil colocar su deuda en los mercados.

Joaquín Gómez, redactor jefe de El Economista, destacaba en Intereconomía que la diferencia entre el bono de referencia europeo, que es el alemán, y el bono de referencia español no había sido tan grande desde el año 97. La decisión de Standard and Poors no me sorprende nada cuando ya a comienzos de diciembre hacíamos una portada en El Economista en la que decíamos que Coca Cola tenía menos riesgo de crédito que el estado español. Donde hace hincapié Standard and Poors es en la recuperación de la economía española. Y es que no atisbamos dónde puede estar el final de la crisis ni dónde se va a producir ese punto de inflexión, pero lo peor es que estamos viendo que en la mejor de las perspectivas tenemos una recuperación en forma de L y el rabillo de la L nos dice que el crecimiento se va a situar en torno a cero o por debajo de cero en los próximos años y eso es lo realmente preocupante. 

En la misma emisora, Hermenegildo Altozano, socio del bufete Dovels, señalaba que la calificación se pierde en el momento en que se somete a vigilancia. Además, esto es una manifestación de que las cosas no se hacen impunemente. Lo que no se puede hacer es estar aumentando el déficit público y pretender que eso no tiene ningún impacto sobre la condición crediticia del estado español. Es bueno que existan las agencias de calificación con todos los peros que se les puede poner porque el aviso a navegantes ya está dado. Y lo que sabemos es que el camino que se ha emprendido y que parece que está colgado en las páginas de Internet con el vídeo del presidente del Gobierno no es el adecuado porque eso lo único que hace es rebajar el riesgo crediticio español.

En la COPE, Pedro J. Ramírez, comentaba la noticia de El Mundo según la cual, el presidente Zapatero ha recibido en las últimas fechas tres informes muy negativos sobre la situación económica: helado se quedó el presidente cuando en las últimas 48 horas le llegaron tres informes de su equipo económico, de algún asesor externos, de personas que él respeta como autoridades en materia económica y los tres coincidentes: recesión, se dice técnicamente cuando hay dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo. Bueno, pues no uno, no dos, no tres, no cuatro, como mínimo cinco trimestres pronostican esos informes que España va a estar en crecimiento negativo. Al presentar (Zapatero) ese plan E no insistió en lo que había dicho la semana anterior de que en marzo o abril empezaríamos a salir desde el punto de vista de la creación de empleo. Lo que publicaba Casimiro García Abadillo ayer revelando que la AEB le había entregado (a Zapatero)  una documentación escrita en marzo, al filo de las elecciones, advirtiéndole que iba a pasar lo que terminó pasando de manera fulminante e inmediata ese mismo año, nos lleva a pensar qué sabía el presidente, cuánto sabía y desde cuándo lo sabía. Y por tanto, en qué medida engañó, falseó, manipuló u ocultó, aunque a lo mejor empezó engañándose a sí mismo.