Enero se ha despedido dejándonos el mayor incremento mensual del paro en veinte años. El aumento además abarca sectores tan diversos como agricultura, industria o servicios y no sólo afecta a la construcción.
En el 2007 España fue el país donde más creció el paro de toda Europa y, por lo que se ve, este 2008 va por el mismo camino. Ante unas perspectivas económicas tan poco halagüeñas, es exigible a los políticos una mínima sensatez. Más que nunca, se hace necesaria una política económica seria, sin improvisaciones ni ocurrencias, que fomente de forma sostenida la creación de empresas y de nuevos puestos de trabajo y no la subasta que estamos viendo de baratijas electorales de unos pocos euros que son pan para hoy y hambre para mañana y con las que no se resuelven en modo alguno los graves problemas de fondo que padece nuestra economía.
María Pérez Pastor
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