Las instituciones que forman el núcleo duro de la compañía Iberia (British Airways, Caja Madrid, BBVA, Altadis o El Corte Inglés) y que controlan el 40% de la aerolínea, no pueden vender todavía, a pesar del recorrido alcista del valor en Bolsa. Acordaron con el Gobierno comprar a 2,90 euros la acción, que aún merodea por los 2,60. Sin embargo, los particulares que acudieron a la OPV podían obtener ya un 124% de plusvalía antes de que se cumpla el tercer año (Iberia fue privatizada en abril de 2001).
El actual equipo ejecutivo, que dirige Fernando Conte, empezará a preocuparse justo cuando los miembros del núcleo duro empiecen a computar plusvalías. Será el momento en que algunos se marchen y British Airways, el llamado socio industrial, sigua suspirando por comerse a Iberia.
