Pero ahora toca salvar los muebles. Y como lo de las infraestructuras "no se arregla en dos días" como defiende Montilla, nada mejor que una buena campaña de imagen diseñada por un publicista. Y si este es progre, mejor que mejor. Y si encima de ser progre participa en el proyecto mediático que estamos lanzando, miel sobre hojuelas. Y con este perfil sólo hay uno: Lluís Bassat. ¿Cómo esconderá el fiasco de Fomento en Barcelona?
Quizás haya visto ‘Cortina de humo' y se le ocurran algunas ideas. Esperemos que no se invente una guerra con Albania. Al fin y al cabo, ¿qué nos han hecho los albaneses?, le preguntaremos. "No, más bien, ¿qué han hecho los albaneses por nosotros?" Llega la publicidad creativa a los ministerios. La magia antes que la realidad, la fantasía antes que las obras, el cartón piedra mejor que las catenarias.