Benedicto XVI les recuerda a los empresarios jóvenes italianos que lo más importante en una empresa es el trabajador
Juan Pablo II habría añadido: porque el factor trabajo no es un factor más de la producción: es "el" factor, dado que hablamos de seres humanos. Su sucesor, Benedicto XVI, ha aprovechado una reunión con los jóvenes empresarios italianos –informa Zenit-para recordarles que el principio y fin de la economía es la vida humana y que los trabajadores constituyen el principal activo de una empresa. Al parecer, el objetivo primero no debe ser "crear valor para el accionista".
Cada día parece más claro que el pensamiento único liberal-capitalista, vigente en la empresa actual se aleja más de la doctrina social de la Iglesia, que en plena globalización paree una doctrina de ultraizquierda.