Los clásicos estudios británicos Hammer, dedicados al cine de terror, vuelven de nuevo a renacer y presentan La mujer de negro, una película con la que el joven actor Daniel Radcliffe pretende hacerse un hueco en el mundo del cine tras encarnar a Harry Potter durante más de una década.

La mujer de negro cuenta con tres de las características propias de un relato de terror gótico: un personaje romántico que se encuentra en un apuro, una mansión encantada y, por supuesto, una presencia  sobrenatural, un fantasma.

Daniel Radcliffe encarna a Arthur Kipps, un joven abogado de Londres que no logra superar la muerte de su esposa a pesar de tener a su cargo un hijo de corta edad al que adora. Al peligrar su trabajo no le queda más remedio que aceptar el encargo de ordenar los papeles de una fallecida que habitaba en una casa situada en una remota aldea. Cuando llega al pueblo, le asombra el carácter huraño de sus gentes y su empeño por esconder a sus hijos de miradas extrañas. Pronto descubre que se cierne una especie de maldición sobre el lugar que tiene relación con la aparición de una mujer, que siempre viste de negro y que, pronto averigua, murió en la mansión donde trabaja…

Este largometraje de terror psicológico, donde se insinúa más que se muestra, ha trasladado a la gran pantalla un best seller del mismo título de Susan Hill. Su director, James Hatkins, ha logrado, con una puesta en escena elegante, recordar las películas clásicas de terror porque consigue provocar  inquietud y sobresalto gracias a toques efectistas que nunca llegan a ser desagradables. Al fondo la percepción de que existe un más allá tras esta vida, desde el momento que hablamos de una película con toque sobrenatural.

Este thriller con pocos diálogos, obliga a Daniel Radcliffe a realizar una interpretación llena de matices en la que el ex Harry Potter está correcto.

La anécdota de la película es que el niño que hace de hijo de Daniel Radcliffe, con el que tiene química, es, en la vida real, su ahijado.

Para: Los que les gusten las películas de terror al estilo de antaño