El copresidente de la tabaquera hispano-francesa Altadis, Pablo Isla, ha aprovechado la Junta General de Accionistas, que se celebró en la mañana del martes 15 en Madrid, para advertir contra la subida desmesurada de impuestos contra el tabaco. Pablo Isla considera que el subidón fiscal de Reino Unido y Francia se han saldado con un fracaso. Se calcula que la tercera parte de los cigarrillos que se consumen en el Reino Unido no han tributado en el país. En Francia, según cálculos del sector, el porcentaje de contrabando alcanza ya el 18%.

 

Dos son las prácticas más habituales en el contrabando de tabaco. En primer lugar, la venta por Internet desde países con menor fiscalidad. En segundo lugar, el contrabando puro y duro. Nada más fácil que cogerse un billete de avión en una compañía de bajo coste, venirse de Londres a Madrid, comprar aquí hasta un máximo de treinta cartones, e incluso más si cuela, para revenderlos en el Reino Unido, donde un paquete de Marlboro cuesta más del doble que en España.

 

Aunque la fiscalidad sobre el tabaco es difícil de precisar (dado que existen tasas específicas e impuestos porcentuales), se calcula que la composición de la fiscalidad del cigarrillo (del más vendido) en Inglaterra supera el 80%, mientras en Francia alcanza el 80,5%. En España, la fiscalidad por cigarrillo más vendido (en este caso, el Fortuna) es un poco inferior al 72%. Y eso sí, gracias a estos porcentajes el contrabando en nuestro país se cree no alcanza ni el 1%.