Insisto: Sí hay que ir a la manifestación contra el aborto del 17 de octubre, porque hay que acudir a toda concentración en favor del más inocente y el indefenso: el concebido y no nacido.

Ahora bien, los organizadores -son tantos que me cuesta aclararme pero otorguémosle la autoría principal al Foro de la Familia, que lidera Benigno Blanco- deberían advertir a los altos cargos del Partido Popular que no serán bien recibidos, tampoco con la milonga del a título privado, porque los altos cargos del PP, por ejemplo Mayor Oreja o Esperanza Aguirre, no tienen nada de privados.

En otras concentraciones contra el aborto, se ha prohibido a partidos decididamente provida, como Alternativa Española o Familia y Vida, que acudieran como tales o incluso que exhibieran banderas de España, un derecho de cualquier español.

En el caso del Partido Popular, el asunto es más grave, dado que, como les recuerda el pertinaz ministro de Fomento de ZP, Pepiño Blanco, en ocho años, cuatro con mayoría absoluta, Aznar no tocó la ley del aborto del 85, actualmente vigente, además de iniciar la masacre de embriones humanos utilizados como cobayas, embriones procedentes de la fecundación in vitro, fue el PP quien introdujo la píldora abortiva y lo que resulta más tenebroso, la abortiva Píldora del Día Después (PDD). O sea, que ni PP ni peperos, o se dará la impresión de que la manifestación se realiza contra la ley socialista a la que se opone el PP pero no contra la ley socialista al que el PP no se opuso.  

Como recuerda Infocatólica, no es de recibo que Esperanza Aguirre, que financia con dinero de los madrileños el 20% de los abortos que se perpetran en Madrid, aparezca como abanderada de la vida. Y no olvidemos que como tal ley, el actual proyecto es más restrictivo que el de 1985. Otra cosa es que se convierta en fraude de ley, que se convertirá. El actual proyecto habla de aborto libre durante las doce primeras semanas, mientras la ley del 85 permite el aborto libre hasta el mismísimo día del nacimiento, siempre que haya peligro para la salud psíquica. Es urgente hacerles saber a los peperos que su actitud tibia ya no engaña a nadie y origina muchos homicidios. De otra forma, el movimiento pro-vida quedará ligado a los pro-muerte del PP.

¿Hay que ir a la manifestación? Sí. ¿Hay que echar al PP de la manifestación? Sí. Lo mismo piensa el secretario de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, quien ha animado en la mañana del jueves a los católicos a acudir a la concentracion del 17-0. Eso sí, monseñor no se ha referido al PP; yo sí.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com