Después de que Rajoy anunciara su intención de objetar
Cospedal anunció este martes la intención del PP de unificar la confusa posición del PP en materia de EpC. Y es que mientras Madrid reconoce la objeción y permitirá que los objetores realicen labores de voluntariado, en Castilla y León, la consejería de Educación resulta tan beligerante como la andaluza.Es de esperar que la posición que tome el partido sea en defensa de un movimiento social que ya aglutina a más de 44.500 padres y que amenaza con que el inicio de curso se quede patas arriba. El movimiento objetor tiene ciertas esperanzas en el PP. En primer lugar, porque el propio Rajoy entrevistado sobre el asunto en El País, señaló lo siguiente:
"La objeción de conciencia es un derecho de las personas. Se pueden objetar algunas leyes como ésta por problemas de conciencia. Y luego son los tribunales los que tienen que tomar la decisión. En este asunto sí me parece justificado. A mí me importa la educación de mis hijos y hay cosas que no me gustan. Y si puedo objetar, porque es un derecho que existe y me asiste, lo voy a hacer".
Pero es que además, la posición del PP en el Congreso de Valencia fue de apoyar y dar una salida digna a los padres objetores. Así que en esas estamos. Ahora la pelota está en el tejado de Génova. Y la plataforma ciudadana HazteOir quiere que se solvente en defensa de la libertad de los padres a educar a sus hijos conforme a sus principios morales y religiosos.