• Este sábado, el Parlamento griego aprobó la nueva reforma fiscal que aumenta otra vez los impuestos sobre la clase media.
  • Andoni Samarás había pedido "paciencia" a unos griegos al límite.
  • Además, se suceden los actos violentos contra periodistas, bancos y dependencias de los partidos del Gobierno.
Salto cualitativo en la crisis griega. Este sábado, el Parlamento griego aprobó la nueva reforma fiscal que aumenta los impuestos sobre la clase media, reduce de ocho a tres los grupos impositivos y fija un tipo único del 42% por todas las rentas superiores a los 42.000 euros, rebajando de hecho los impuestos para las rentas más altas que hasta ahora, sobre los 100.000, tributaban al 45%. De esta manera, el Ejecutivo sigue haciendo los deberes pactados con la troika mientras a los griegos les exprimen hasta límites ya inhumanos para satisfacer las ansias de los inversores en deuda griega.

Bueno, pues esta madrugada unos desconocidos dispararon contra el despacho del primer ministro griego, Andoni Samarás (en la imagen junto a la canciller alemana Angela Merkel), en la sede de su partido, el conservador Nueva Democracia, en Atenas, en lo que supone un aumento en las tensiones sociales en Grecia debido a los ajustes.

Pero es que, según las noticias que llegan de Grecia, esta agresión se enmarca en una nueva serie de actos violentos contra periodistas, bancos y dependencias de los partidos del Gobierno, que comenzó en la madrugada del viernes con el ataque coordinado con bombas caseras contra las viviendas de cinco periodistas.

Situación preocupante, la de Grecia.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com