El banco lleva alternando como imagen publicitaria a Lewis Hamilton y a Fernando Alonso, según quien gane cada carrera

La diferencia entre el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y su segundo, el consejero delegado, Alfredo Sáenz, es que el primero no responde a aquellas pregonas que no desea responder, sincopando respuestas y reduciendo los matices de la misma. Botín no se distingue por su oratoria, pero es el mejor utilizando el truco de que el analista o el periodista no pueda "contra-preguntar". La técnica de su consejero delegado es distinta: Alfredo Sáenz, natural de Bilbao, lo que hace es, simplemente, jactarse de que no va a responder a la pregunta, con ese tono cansino que últimamente utiliza con analistas y periodistas, dos colectivos que con el paso del tiempo empiezan a aburrirle grandemente.

Por ejemplo, Alfredo Sáenz respondió así a los periodistas acerca de la actitud de Santander, patrocinador de McLaren Mercedes, si se demostrara el presunto espionaje de la escudería McLaren, donde corren Fernando Alonso y Lewis Hamilton: "Con ese ‘if' –don Alfredo sigue recibiendo clases de inglés- de pregunta hipotética, ni quiero ni sé contestar".

Lo cierto es que el pasado lunes, tras el triunfo de Alonso en el Gran Premio de Europa de Fórmula 1 el Santander volvió a exhibirle como su cinco publicitario. Llevaba varias semanas donde Alonso había sido preterido ante su compañero Hamilton, líder indiscutible… hasta ese momento.

Una respuesta parecida a la pregunta de si observa riesgo sistémico en las hipotecas ‘subprime' norteamericanas: "no tenemos experiencia en EEUU y no puedo opinar, pero dudo que pueda convertirse en sistémico".