Kirchner continúa adelante en su empeño por que la Argentina ratifique el Protocolo Opcional de la Convención Internacional contra la Discriminación de la Mujer, conocida como CEDAW, el instrumento de Naciones Unidas para universalizar la legalización del aborto. El juego es muy sencillo : cualquier impedimento al aborto supone una discriminación contra la mujer. De esta forma, el asesinato de inocentes se convierte en un derecho.
Pues bien, el Gobierno Kirchner se ha empeñado en trasladar al ordenamiento interno el Cedaw, dentro de su hoja de ruta para legalizar el aborto y convertir a la Argentina, antaño uno de los países más defensores de la vida del más débil en un ejemplo del Nuevo Orden Mundial (NOM), basado, antes que en cualquier otra cosa, en la ingeniería social. Notivida tiene todos los datos.