De esta forma se consuma el fracaso de Alfredo Sáenz y la pérdida de la segunda petrolera española

Resumamos los hechos: Alfredo Sáenz, consejero delegado del Santander decide lanzar una OPA sobre Cepsa, no para quedarse con la petrolera, sino para forzar una contraopa de los franceses de Total y salirse definitivamente de la compañía. La operación fracasa porque Total no pica y lleva al banco de Botín a los tribunales y estos le dan la razón.

A partir de ahí, todo ha sido un rosario de negociaciones para marcharse de Cepsa. Sáenz colocó en la presidencia a su amigo Santiago Bergareche para dejarles claro a los franceses que a pesar de haber perdido en los tribunales, no se irían hasta encontrar un buen comprador. Parece que ya lo han conseguido

No es pensable que la operación se cierre este mismo miércoles, pero lo cierto es que el banco ha lanzado un comunicado a la CNMV en el confirmaba que mantenía negociación para la venta de su paquete accionarial. "El rango de precios en el que se está negociando esta potencial venta es de entre 30 y 35 euros por acción", señala el banco.

Todo parece indicar que el Santander está dispuesto a rebajar el precio con tal de vender y se ha plegado a la autoridad de Abu Dhabi (IPIC), que ya posee un 10% de Cepsa y que, de cerrarse la operación, alcanzaría un 46%. No obstante, aunque los accionistas minoritarios sean muy pocos, está claro que no están saliendo beneficiados por esta negociación, pero la CNMV, como siempre, a por uvas.