La ministra de Vivienda, Carme Chacón, se mostró contraria a una política coercitiva en materia de vivienda. De esta manera se desmarcaba del IBI reforzado propuesto por el Ayuntamiento de Sevilla. Sin embargo, algo ha pasado para que de la noche a la mañana avale el Pacto para la Vivienda impulsado por la Generalitat catalana que incluye el alquiler forzoso de las viviendas desocupadas. Chacón lo considera "inteligente". ¿Cuál es la diferencia? Fácil. Chacón no tiene ningún compromiso con el socialismo andaluz. Sin embargo, la cara JASP del gabinete Zapatero tiene serios compromisos con el PSC. Hasta se rumorea que podría encabezar las listas del PSC en Barcelona...
Por otra parte, resulta chocante que los totalistaristas persistan en el error. En primer lugar porque deberán de sortear las dificultades de definición de una vivienda vacía. ¿Segundas residencias o torres? Por otra parte, sería mucho más fácil perseguir de manera eficaz a los morosos profesionales y modificar la Ley de Arrendamientos Urbanos. Pero los socialistas siguen anclados en su empeño totalitario y demagógico. Y así, hasta la derrota final.
