Goñi es pepero, sí, pero codirige la entidad junto a su gran amigo Emilio Ontiveros. Feijóo y Rato se enzarzan: el uno denuncia ante Rajoy que se queda sin cajas de ahorros; el otro, se empeña en absorber a la entidad gallega.
Enrique Goñi preside la Caja de Ahorros de Navarra (CAN). En la CAN aseguran que la entidad se dirige desde el Gabinete de Imagen, tal es la preocupación de Goñi por su imagen pública. La segunda característica es que el navarro ha realizado la primera fusión fría tal y como las desea el Banco de España, el PSOE y el PP: un fusión inter-regional entre la CAN y Caja Canarias -por el momento la mallorquina Sa Nostra queda fuera- a la que uniría la castellana Caja de Burgos (y quizás Ávila y Segovia) y, atención, ahora se abre la veda de la gallega Caixanova.
Con ello, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO) quiere matar varios pájaros de un tiro: le quiebra el espinazo al poder autonómico en cajas de ahorros, fastidiar al gallego Núñez Feijóo, empeñado en crear una gran entidad gallega entre Caixa Galicia y Caixanova y, sobre todo y ante todo, favorecer la vanidad de Goñi para convertir a media docena de cajas en un banco.
¿Que Goñi es muy pepero? Sí, pero, ojo, Caja Navarra está codirigida por el catedrático de Economía, líder de Asesores Financieros Internacionales, Emilio Ontiveros un hombre capaz, reconocido filosocialista y el primer asesor de cajas de España. Y ojo, porque Ontiveros también asesora a Caixanova y representa el mejor enlace para conseguir que la caja gallega se una definitivamente a Banca Cívica.
Eso sí, Julio Fernández Gayoso, presidente de Caixanova y el mayor obstáculo de Feijóo para conseguir la fusión, no lo acaba de ver claro, así como su directivos. Saben que Goñi pilotará el proceso y que tal vez les resultaría mejor unirse al proyecto de Cajastur y Caja Murcia. Tampoco aquí tienen asegurado el mando pero se deciden por una o por otra, lo cierto es que MAFO aplaudirá con entusiasmo. En cualquier caso, el favorito del gobernador es, curiosamente, Goñi, más que nada goñista pero próximo al PP. Si logran sumar la CAN con una caja canaria, la gallega y tres castellanas conformarían un complejo bastante decente y, sobre todo, contribuirá a eliminar las cajas de ahorros y convertirlas en banca, que de eso se trata.
Luego está el enfrentamiento Rato-Feijóo. Rodrigo Rato no ha hecho carrera en el Gobierno y en el FMI para presidir Caja Madrid. Lo que quiere es comerse a la Caja de Ahorros del Mediterráneo, con otra Banca Cívica que colocar de holding, porque el ex vicepresidente es un entusiasta de la conversión de cajas de ahorros en bancos, que es lo moderno. Rato quiere tener una gran caja para abordar una gran fusión con La Caixa.
Eso sí, Feijóo se queja ante Rajoy: Si Caixanova se marcha con Banca Cívica y Caixa Galicia con Caja Madrid, ¿qué le quedaría a Galicia? Por eso durante la mañana del viernes, el presidente de la Xunta recordaba que, antes que miembro del Partido Popular, es presidente de Galicia.
Eulogio López
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