Sr. Director:

Sr. Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno de España:

Usted que es tan feminista y tan enemigo de la violencia de género y que además tiene tanto talante, no puede permanecer impasible y cruzado de brazos ante el ataque a una mujer vasca, noble, decente y buena, que está aún convaleciente de un temible cáncer.

Esta mujer ha sido atacada, vilipendiada e insultada atrozmente ante la pasividad del Rector (que por vergüenza debería dimitir inmediatamente) en la Universidad de Santiago de Compostela, (donde iba a dar una conferencia ) por una manada de radicales nacionalistas, con los que, Sr. presidente, usted gobierna en Galicia y en toda España.

Se la ha intentado agredir, la han llamado asesina (a ella que vio morir en sus brazos a Gregorio Ordóñez asesinado por ETA) y la han deseado la muerte por esa misma banda de malhechores.

Se llama María San Gil y tiene el honor de ser presidenta del Partido Popular del País Vasco. Yo le pido por su demostrado amor a la libertad, a la democracia y a las buenas costumbres, (que estoy convencido atesora en sumo grado) condene y persiga enérgicamente (a día de hoy aún no lo ha hecho), semejante atropello incivil, violento, cobarde y totalmente antidemocrático.

Lo espero de su hombría de bien, de su recto proceder y sus acrisolados valores civiles, por lo que le quedo muy reconocido y agradecido.

Aprovecho para  enviarle un atento y respetuoso saludo.

Fernando Cavanillas de Blas    

ferdustre@gmail.com