Por su alianza con los conservadores británicos para las elecciones europeas, el líder de Alternativa España (AES), Rafael López Diéguez, viajó a Mazarrón, donde  conviven muchos británicos, en su mayoría jubilados.

Visitó una urbanización de 4.000 viviendas y entones comprendió por qué ingleses, franceses, holandeses y alemanes residentes en España, especialmente en la costa levantina y andaluza, acusan a nuestro país de corrupción.

En esa enorme urbanización había casas sin luz, sin agua, sin gas. Paredes agrietadas y estancias con un tejado con filtros desde donde podía verse el cielo. Carreteras interiores con grieta de medio metro de anchura, que enmarcaban unifamiliares con cédula de habitabilidad pero ya vendidos... y cobrados.

Su socio, el eurodiputado británico Daniel Hannan asegura que en su despacho de Bruselas no dejan de recibir denuncias de ciudadanos británicos residentes, que nada pueden hacer porque el PSOE y el PP siguen manteniendo una política municipal corrupta y vuelven la cabeza hacia otro lado cuando llegan las protestas de extranjeros residentes.

De hecho, los casos de corrupción no importan a la clase política española salvo para utilizarlos como pedrada contra el adversario, no para solventar la corrupción en sí misma. Sin embargo, los ciudadanos tenemos la suerte de que nos enteramos de toda la mugre existente gracias a que el PP la utiliza para atacar el PSOE, el PSOE para atacar al PP y el juez Garzón para su propio lucimiento. Pero ninguno de los tres elementos le importan un bledo al que sufre la corrupción: Juan Español y, en ocasiones, como en Mazarrón, John Bull.  

La corrupción lleva a la impunidad del Falcon de ZP ¿Me acusáis de utilizar un avión de las fuerzas aéreas para un mitin de mi partido? Pues lo voy a seguir haciendo y aquí está el ministro Rasputín Rubalcaba para explicar que lo hacen por la seguridad del señor presidente. Pues no: cuando está en un mitin pidiendo el voto para el PSOE que la seguridad se la pague el partido, que es el beneficiario. Y el viaje lo mismo. Aunque la casuística para distinguir cuándo actúa como presidente del Gobierno y cuándo como candidato es muy amplia la idea permanece: el PSOE es para llegar al poder, el Gobierno para gestionar ese poder. Sencillamente, ZP ha pasado de la corrupción a la impunidad o corrupción institucionalizada.

En definitiva, Europa, con sus listas únicas en 27 circunscripciones, constituye la mejor ocasión para que lleguen nuevos partidos, no manchados por la corrupción. Esa es la razón por la que los conservadores eligieron como socios a Alternativa Española: ni sombra de corrupción, entre otras cosas porque, al no haberse estrenado en las instituciones, no recibe dinero público alguno. Y eso resulta de lo más útil.

Ahora bien, si elevamos la anécdota a categoría, se entienden las palabras de Benedicto XVI en el sentido de que la clave para luchar contra la pobreza es la sobriedad; cuando los políticos acostumbran a vivir como reyes, son incapaces de remediar la miseria porque se comportan como los ricos, quienes, según el viejo aforismo, "no entienden la pobreza porque no pueden comprender por qué cuando alguien tiene hambre, no toca la campanilla para que aparezca el mayordomo con unas sabrosasa viandas".
Eulogio López

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