• La oposición denuncia las pretensiones del presidente turco con su reforma constitucional, que el Parlamento ya ha admitido a trámite.
  • El próximo paso, el debate y votación de los 18 artículos de la reforma, que durará dos semanas, y donde se votará la reforma en su conjunto.
En Turquía, la oposición rechaza las pretensiones del gobernante AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo) de introducir un sistema presidencial a instancias del presidente Recep Tayyip Erdogan (en la imagen) pues teme, en la práctica, una "dictadura", informa DW. Y es que implantar una democracia parlamentaria con sistema presidencial bajo Erdogan significaría únicamente que el hombre a la cabeza del Estado tendría aún más poder. Desde el fallido golpe de Estado de julio, Turquía se encuentra en situación de estado de excepción. Erdogan puede gobernar por decreto. Pero hasta ahora, es necesario que esos decretos sean aprobados por el Parlamento. Un sistema presidencial eliminaría ese control parlamentario y, además, el jefe de Estado sería también jefe de Gobierno. Así, Erdogan podría nombrar y destituir a todos sus representantes y ministros, y ya no le sustituiría el presidente del Parlamento sino sus propios vicepresidentes. También se levantaría la independencia formal del presidente, hasta ahora parte integral del sistema político del país. Formalmente, Erdogan no es miembro del AKP, pero tampoco oculta su apoyo a su antiguo partido. Por eso, en el AKP cuenta con mucho apoyo para la reforma. Hasta ahí la teoría. En la práctica, ayer lunes 9 de enero Erdogan dio un paso más hacia la construcción de ese sistema presidencialista al aceptar el Parlamento de Ankara, en una votación, el debate sobre la reforma constitucional necesaria para ello. Según la agencia de noticias estatal Anadolu, votaron a favor 338 de los 480 parlamentarios presentes, cuando eran necesarios al menos 330, recoge también DW. El gobernante Partido de la Justicia y Desarrollo (AKP), que dispone de 316 escaños, obtuvo por lo tanto respaldo dentro de las filas opositoras. El próximo paso será el debate y votación sobre cada uno de los 18 artículos de la reforma, que se calcula vayan a durar dos semanas, tras lo que se votará la reforma en su conjunto. Veremos lo que ocurre. Permanezcan atentos a la pantalla… Andrés Velázquez andres@hispanidad.com