- De momento, la compañía ha gestionado bien el tipo de cambio de la libra esterlina.
- Pero las incertidumbres que se abren son muchas y muy variadas.
- El resultado del ejercicio sigue la tendencia mostrada durante el tercer trimestre: el ebitda aumenta un 9,9%, hasta los 7.807,7 millones de euros y el beneficio, un 11,7%, hasta los 2.705 millones.
- La reducción de gastos ha sido significativa: un 2,5% los de personal y un 9,9% el destinado a pagar impuestos.
- La generación aumenta un 2,2%, consiguiendo un mix más rentable gracias al descenso en un 67% de la producción de las plantas de carbón.
La presentación de este miércoles de los
resultados de la compañía energética Iberdrola, viene precedida de una gran controversia sobre la repercusión de los costes reales de la producción de energía en el consumidor final.
Como consecuencia de la adversa situación climatológica vivida en nuestro país el mes pasado, el precio del megavatio se llegó a situar por encima de los 100€, lo que elevará la factura del consumo doméstico alrededor de un 26% para el mes de enero.
Esto ha generado una considerable alarma entre los consumidores
que acusan a las empresas energéticas de solo mirar por su dividendo. Tampoco gustaron las declaraciones del presidente de la compañía al
Financial Times, en las que calificaba de kafkiano el sistema eléctrico europeo, cuya regulación fomenta el mantenimiento de las
actuales plantas de carbón más contaminantes, a base de subsidios, en lugar de fomentar la inversión en renovables.
En este contexto,
los datos presentados por la sociedad están en línea con los ya vistos en el tercer trimestre, demostrando una progresión satisfactoria dentro de un ejercicio en el que los resultados son un buen reflejo de la evolución positiva de la actividad. Así, la producción neta de energía en este ejercicio ha crecido un 2,2%, consiguiendo un mix más rentable gracias al descenso en un 67% de la producción de las plantas de carbón.
La energía distribuida crece un 2,3% respecto al ejercicio anterior, por lo que el margen bruto llega a los 12.916,2 millones de euros (M€), que supone un 0,6% de incremento interanual.
Durante el ejercicio se ha registrado una importante
reducción de los gastos operativos que han fluctuado entre una disminución del 2,5% en los gastos de personal y el 9,9% en el epígrafe de tributos. Al final, el ebitda registrado al cierre ha ascendido a 7.807,7M€, que supone un 9,9% de incremento interanual.
Los gastos financieros, que han registrado un crecimiento del 22,1%, se han visto compensados por el extraordinario incremento del 81,2% en los ingresos financieros, producto de la precisa gestión de los riesgos de tipos de cambio mediante coberturas, en especial respecto al libra esterlina.
Y es que la filial Scottish Power, adquirida en 2007, ha recibido una inversión de cerca de 1.360M€ para del desarrollo de redes y plantas de energías renovables y en la que, hasta 2020, prevé una inversión de aproximadamente un tercio del presupuesto para el periodo, cifrado en 22.000M€.
Buena política la de Iberdrola en este área geográfica que, además de representar el 19,7% de los 2.705M€ de beneficio neto obtenido en este ejercicio (11,7% más que en 2015), representa la principal incertidumbre para los próximos meses por los riesgos que puede comportar el
Brexit. Dudas ocasionadas, bien porque la situación económica provoque una ralentización del consumo, por un posible cambio regulatorio en los incentivos a las renovables una vez Reino Unido se encuentre fuera de la regulación de la UE,
o por la posibilidad de que Escocia, proclive a la permanencia en la Comunidad, provoque una inestabilidad política con la convocatoria de un referéndum de secesión. De cualquier forma, a fecha de hoy miércoles,
Iberdrola tiene cubierta la contingencia del 90% del resultado cifrado en libras esterlinas.
La deuda financiera neta crece en el ejercicio el 6,6% hasta situarse en los 29.414M€. Esto se debe a la anticipación de inversiones en energías renovables, como los 2.500M€ que se destinarán a la construcción del
mayor parque eólico marino del mundo (East Anglia), precisamente, en el Reino Unido.
En estos días se ha sabido que cerca de 350 ejecutivos de la compañía, incluido su presidente I
gnacio Sánchez Galán, percibirán un bonus en acciones del grupo por un importe de unos 115M€, como resultado del cumplimiento del llamado "
Bono Estratégico" 2014-2016, al haber alcanzado los objetivos recogidos en él.
Rodrigo de Silos
rodrigode@hispanidad.com