Es lo que suele ocurrir con los delitos: enseguida se judicializan, señora ministro de Asuntos Sociales
Ione Belarra, la ministra más brillante del Gabinete Sánchez, se ha mostrado partidaria de que que Carlos Puigdemont vuelva a España... se supone que sin cargos, o con el indulto prometido de antemano.
Aunque, de inmediato, su compañera, otro cerebro, Irene Montero, ha concretado que debe volver a España y ser juzgado.
En cualquier caso, Ione, campeona, por supuesto que su huida tuvo que ver con la "judicialización" del caso catalán: es que si no huía a Bélgica le sentaban en el banquillo.
Mismamente, el vicepresidente de la Generalitat, segundo de Puchi,, un tal Oriol Junqueras, se quedó para responder sus actos y le cayeron 13 años de cárcel.
En cualquier caso, la afición a la tautología y a la solemnización de lo obvio crece en Podemos
Belarra pronunció este espléndido argumento tras de sus muletillas favoritas: "Por supuesto que sí"... la culpa de la huida de Puchi es la judicialización de su delito. Es lo que suele ocurrir con los delitos: se judicializan enseguida.
Brillante, brillante.