La película francesa ‘Cuties’, exhibida por Netflix, está dando mucho que hablar -mal- por cosificar sexualmente a unas niñas y adolescentes.

El último episodio ha tenido lugar en Tyler, un pequeño condado del este de Texas (Estados Unidos), en donde un jurado ha decidido denunciar a Netflix, publica Aciprensa.

La demanda, presentada el 23 de septiembre, denuncia que Netflix “promovió conscientemente material visual que representa la exhibición lasciva de los genitales o el área púbica de una niña vestida o parcialmente vestida que tenía menos de 18 años”. También se afirma que el filme “no tiene ningún valor literario, artístico, político o científico serio”.

En un comunicado de prensa publicado el 6 de octubre en Facebook, el fiscal de distrito del condado, Lucas Babin, dijo que después de ver la película “sabía que había una causa probable para creer que era un delito según la Sección 43.262 del Código Penal de Texas”. “Los legisladores de este estado creen que promover cierto material lascivo con niños tiene consecuencias destructivas. Si ese material se distribuye a gran escala, ¿no sería necesario perseguirlo incluso más?”, dijo en el comunicado, recoge Aciprensa.

Por otra parte, el 11 de septiembre, el senador del Partido Republicano por el estado de Texas, Ted Cruz, pidió al fiscal general de Estados Unidos que investigue si Netflix y Cuties “violaron alguna ley federal contra la producción y distribución de pornografía infantil”.

Asimismo, el Gobierno de Brasil, pidió el 21 de septiembre suspender la transmisión de la película en su territorio y que se abra una investigación que determine “la responsabilidad de la provisión y distribución de contenido pornográfico que involucra niños”.

Ante todo ello, Netflix se disculpó públicamente por la sinopsis como por la imagen promocional, que consideró “ilustraciones inapropiadas”, pero no retiró la película. Unos cachondos, vamos.

Por cierto que una campaña de la plataforma CitizenGO exige a Netflix que “retire esta producción altamente ofensiva”.