- Le sustituye otro exTelefónica, Guillermo Fernández Vidal... parece una solución de transición, dada su edad (70 años).
- Y ahora se abre paso una nueva Junta extraordinaria, donde tendrán protagonismo los dos accionistas principales.
- Es decir, Juan Carlos Smith (Eralan Inversiones), que posee el 5%, y Manuel García-Durán (3%).
- En cuanto a los resultados, cabe señalar que son peores de lo que se dice, a pesar de salir de pérdidas.
- Y la acción sigue estando un 30% por debajo de su valor. La bolsa no premia las cuentas: cae un 3,5%.
Cambio de sillones en
Ezentis. Tras su fracaso,
Luis Solana abandona la presidencia y le sustituye otro exTelefónica,
Guillermo Fernández Vidal. Recuerden que Solana, que tiene más de 80 años, protagonizó una entrada inexplicable en la compañía en octubre, tras la marcha de
Manuel García-Durán. En este tiempo, a Solana le han pasado más cosas que a cualquier otro presidente de una compañía: se ha celebrado una
Junta de Accionistas en la que echaron a los dos primeros ejecutivos (el Ceo y el director general corporativo), no se ha aprobado ninguna ampliación de capital,
Enrique Riquelme entró como accionista mayoritario pero ya no lo es y además, está el rechazo mayoritario de los accionistas. En otra empresa, Solana habría tenido que dimitir, pero aquí se ha salvado.
Ahora, cede la silla de presidente a otra
vieja gloria. Se trata de Guillermo Fernández Vidal, un ingeniero de 70 años y que fue un gran comercial de
Telefónica. Parece una solución de transición, dada su edad y teniendo en cuenta que hace unos días quería marcharse de la compañía.
Ahora se abre paso una nueva
Junta de Accionistas extraordinaria (ya hay una petición formal ante notario), donde tendrán un gran protagonismo los dos accionistas principales. Es decir,
Juan Carlos Smith, de Eralan Inversiones, que posee el 5% del capital, y
Manuel García-Durán (en torno al 3%).
En cuanto a los
resultados de 2016, cabe señalar que son peores de lo que se dice, a pesar de
salir de pérdidas (ha ganado 903.000 euros). Y es que el beneficio, el
Ebitda y los ingresos son inferiores a los del tercer trimestre, además, los gastos financieros y la deuda han aumentado.
Y mientras, la
acción sigue estando un 30% por debajo del valor que tenía antes de la llegada de Solana. Asimismo, la bolsa no ha premiado las cuentas presentadas: la acción ha caído un 3,5% este martes.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com